El periodista Nielsen Buján llegó al Santos de Guápiles hace dos meses y medio con la misión de levantar al equipo guapileño y ayudarlo a escapar de la zona de descenso.
El comunicador fue contratado por la dirigencia santista, para que repitiera la fórmula que aplicó con equipos como Cartaginés, Pérez Zeledón, Grecia y Barrio México.
“Llegué al equipo cuando Julio César Dely Valdés aún era el técnico. Le expliqué a los directivos mi forma de trabajar y coordiné una sesión inicial con Julio César para que me explicara las sensaciones del equipo y buscar la forma de trabajar.
“Fue muy interesante, porque cuando comenzamos a trabajar el pensamiento en común de los jugadores era que querían ganar; pero antes había que identificar algunos puntos en los que debíamos concentrarnos e identificar las necesidades puntuales de cada jugador, que iban también enfocadas en trabajo físico y sostuvimos algunas conversaciones”, afirmó.
El comunicador recordó que con las primeras sesiones comenzó a notar un cambio de actitud en el plantel y esto no se perdió con el cambio de técnico.
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“Con Randall (Row) hay un tema a favor y es que conoce a los jugadores, el ambiente. En este momento, lo que me dice es que hay un mensaje de esperanza, de cómo plantear el siguiente torneo, él se encarga de analizar a los jugadores, analiza el contexto de cada uno y siento que la adaptación ha sido muy efectiva.
“Creo que al mes ya notamos que los jugadores estaban más animados, siempre han estado dispuestos a colaborar y dejar que podamos potenciar sus cualidades. En buena teoría seguiremos trabajando con Santos el próximo torneo, porque hay que seguir reforzando cosas”, manifestó.
Poco a poco
Nielsen añadió que emplea un método propio llamado POM (Prioridades, Oportunidades y Metas), en el que se definen prioridades y se debe comprender por qué hay que cambiar algunas cosas para lograr los objetivos.
“Hicimos una lista de objetivos generales y específicos y a partir de ahí establecer metas. Una de las metas que nos trazamos fue que, terminando el campeonato íbamos a estar fuera de descenso y a la fecha lo estamos logrando.
“Era importante salir de esos números para empezar el torneo con otro semblante y parte de las prioridades son identificar a dónde debe aportar, cómo puede aportar y cuánto tiene que aportar para lograr el resultado”, destacó.
Nielsen añadió que, como parte del trabajo, tuvo que enfocarse en hacerle ver a los jugadores que podían ganar partidos en el campeonato.
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“El equipo tenía meses de no ganar y algunos tenían esa idea, de que iban a cerrar el torneo sin conocer la victoria. Lo creían porque estaban entrenando, se preparaban y era necesario romper el cascarón.
“Con la primera victoria con Randall en el banquillo (20 de octubre ante Guanacasteca) entendieron que sí era posible y a partir de ahí el club tomó otros aires, el cuerpo técnico y jugadores sabe que tienen las herramientas para lograrlo”, dijo.
La clave
¿Cuál ha sido la clave para que los futbolistas caribeños cambiaran de chip en tan poco tiempo?
“A diferencia de otros equipos en los que he estado, los jugadores del Santos escuchan, quieren aprender y son muy resilientes, saben cómo afrontar las adversidades. Se les ha dado un mensaje directo, aunque la gente no lo crea, había que despertar en ellos sus capacidades, reforzar los liderazgos.
“Los jugadores saben lo que deben hacer dentro de la cancha, se preparan para eso, pero a veces no trabajan la parte mental y es muy importante. Por ejemplo, antes ponían en el camerino música como triste y no ayudaba con el estado de ánimo de los futbolistas, ahora recurren a otros géneros más alegres, hay una mayor unión”, explicó.
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Para Nielsen, cada victoria es importante, sobre todo en el momento en el que se encuentra el Santos, pero hay otra meta que es igual de importante que conseguir los tres puntos en cada partido.
“Estamos muy fortalecidos como equipo, debemos estar unidos para trabajar como una familia. Como en todo, hay diferencias, pero ahora se respiran aires distintos, el empatarle al Saprissa (3-3 el 10 de noviembre) le dio una mejor energía más enfocada al club, que hay cualidades para competir.
“Ahora iremos el domingo a jugar contra Herediano creyendo en que sí es posible, con el paso del tiempo volveremos a competir, a ver las luces y alcanzar el nivel que el equipo tuvo hace unos meses”, manifestó.