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El centrodelantero de 13 años de edad, João Mendes, fue fichado por Cruzeiro luego de superar una prueba en donde nunca comentó que es hijo del astro brasileño Ronaldinho, lo que le brinda un doble mérito en el primer paso que dio en su carrera.
En las últimas horas el joven, que tiene un físico privilegiado de 1,78 metros de altura, entrenará de forma separada con personal del club ya que podrá firmar un contrato de profesional cuando cumpla los 14.
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Mendes fue acompañado por su madre a Belo Horizonte, en donde llegaron a un acuerdo con el club para que empiece con el grupo sub-13.
Según medios internacionales, el hijo de Dinho tiene un futuro parecido al del padre y por eso fue pretendido en su momento por PSG francés, club que se interesó en él tras observarlo en la Academia Cup en París, donde fue elegido como uno de los mejores jugadores del torneo.
“Siempre fue mi sueño y debe ser su sueño también, el tener un hijo jugador”, relató el joven en una entrevista con la “Radio Itatiaia”.
La idea de Joao fue ocultar su historia. Según informa Globoesporte, el joven quería que lo contrataran por sus virtudes futbolísticas y no por ser el hijo de Ronaldinho, algo que para él iba a condicionar la negociación con los clubes.
Con aires de delantero, el también hijo de Janaína Natielle Mendes, exbailarina, pasó por el fútbol infantil del París Saint Germain, además de transitar por las academias del Flamengo.
“Estoy feliz con la transición, y espero que funcione bien y me estrene con el grupo. Fue muy rápida esta transición de pruebas hasta quedar con el equipo. Es una sensación única jugar en uno de los clubes más grandes de Brasil”, reconoció la joven promesa en una entrevista con “Hoje em Dia”.
“Yo voy a vivir en Belo Horizonte y entrenar con el equipo”, advirtió el joven de 13 años, quien parece haber heredado la habilidad innata de su padre en el deporte. Ahora, deberá continuar formándose y esperar al próximo año para dar sus primeros pasos en el fútbol profesional.
Joao entendió que los dirigentes más importantes de los clubes iban a seleccionarlo por la influencia de ser quien es. En Cruzeiro nadie supo que su padre era Ronaldinho hasta que los medios lo publicaron.
Luego de llegar al Cruzeiro, su parentesco con el astro brasileño salió a la luz y ahora las comparaciones están a la orden del día.
