El liguismo está luto debido al fallecimiento de don Rafael Solís, quien fue presidente del club entre los años 1998 y 2002.
Solís, quien falleció este lunes en la madrugada, era arquitecto de profesión y es recordado por haber sido el encargado de traer al país al técnico colombiano Jorge Luis Pinto, quien hizo tetracampeones a los rojinegros en el año 2003.
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La amistad entre ambos perduró con el paso de los años, al punto que en el año 2017, Solís junto a Fernando Ocampo, actual presidente manudo, fueron a Colombia para tratar de convencer al cafetero de volver a dirigir a los rojinegros, pero no lo consiguieron.
Solís fue uno de los jerarcas más respetados en la historia del club y uno de los consejeros de Ocampo.
"Una persona que deja un legado como el que dejó Rafael Solís, siempre es un vacío que cala. La enfermedad de Rafael se le manifestó poquitos días antes del Día del Padre (el pasado 16 de junio), su familiares corrieron, lo tuvieron bajo cuidado médico, él tenía una hija que es médica.
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“Dios decidió llevárselo esta madrugada (de lunes), Rafael deja un legado absolutamente imborrable, basta decir que bajo la presidencia de él ganamos una Copa Interclubes Uncaf, jugamos la Merco Norte”, señaló José Cabezas, amigo personal de Solís y actual directivo manudo, en el programa Corazón Manudo.
Solís llegó a la presidencia rojinegra en sustitución de Mario Chacón Soto (ya fallecido).
Cabezas y Solís contrataron primero a Guilherme Farinha con quien ganaron los dos primeros títulos del tetracampeonato y luego a Pinto, quien conquistó otros dos campeonatos.
“Todo el mundo lo cuestionó:'¿Cómo de Colombia, un entrenador al que nadie conoce?' Él (Solís) se mantuvo firme, lo trajo y ya sabemos la historia de don Jorge Luis con la Liga”, señaló Cabezas.