Michaell Chirinos fue uno de los refuerzos que presentó este viernes el Deportivo Saprissa a los medios de comunicación y el catracho, en medio de la emoción por vestir la morada, comentó cómo una llamada en su tiempo de almuerzo fue el inicio de su aventura con los morados.
El propio Chirinos nos relató cómo fue ese momento que nunca lo olvidará.
“Me agarró por sorpresa, porque, de hecho, estaba en el almuerzo y me dijeron que Saprissa quería hablar conmigo. A partir de ahí se empezaron a dar las negociaciones, duraron como tres días, todo fue muy rápido, fueron muy precisos con las cosas que me pidieron y ahora estoy muy feliz de estar aquí”, relató.
Según nos contó Michaell, esa llamada fue el pasado lunes 17 de julio y el 20 fue cuando el medio hondureño, diario Diez, reveló que el futbolista había abandonado la pretemporada de Olimpia y tomaba un avión para afinar detalles.
“Exactamente, la negociación se cerró cerca de las 4 p.m. del día anterior; me despedí de mis compañeros en la mañana y luego salí al aeropuerto para viajar rumbo a Honduras para estar con mi familia, hacer el papeleo que el equipo me pidió y después trasladarme a Costa Rica”, contó el jugador a La Teja.
Incluso, dijo que tenía pensado estampar su firma con los Albos, pero esa llamada cambió todo.
“Fue algo diferente, una negociación que no se pudo dar en Olimpia; obviamente, tenía que ver mi futuro para el bienestar de mi carrera y mi familia. Me salió la oportunidad en Saprissa, es el club más grande de Costa Rica, les dije que sí sin pensarlo, ahora que estoy aquí me llena de alegría por ver todo esto”, dijo con una sonrisa de oreja a oreja.
De paso, le agradeció a los aficionados del Olimpia por su apoyo y de una advirtió, si por cosas del destino les hace un gol vestido de morado, no lo celebrará por respeto.
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Impresionado con la Cueva
Su llegada al Monstruo lo llena de mucha motivación porque se lo esperaba desde hace muchos años; sobre todo, saber más del estadio Ricardo Saprissa, un reducto que ya conoce por la presión que le aplica al rival.
“Claro que sí, desde que lo miras desde afuera es impresionante, tras realizar el recorrido y ver las instalaciones me impresionó aún más. No hace falta estar en un partido para sentir la presión de la gente, el ambiente y los mosaicos que sacan”, comentó.
Bien asesorado
Cuando llegó al país indicó que varios compatriotas lo orientaron para que aceptara jugar en Tiquicia; uno de ellos fue Alex López, jugador de Alajuelense, a quien interrogó y hasta le sacó datos vacilones para agarrar bolados.
“Desde hace tiempo sabía que Saprissa es el equipo más grande de Costa Rica; obviamente, vi videos del equipo, le consulté a varios compañeros sobre el país. A Alex López le pregunté cómo era el campeonato, el ambiente en el estadio, cómo se viven los clásicos, cosas que debe pensar bien para poder estar tranquilo y me ayudó mucho para tomar la decisión”, expresó el atacante.
Uno de los objetivos que se planteó es igualar el cariño que dejó Amado “El Lobo” Guevara en la afición saprissista y aunque lo ve rudo, porque tiene claro lo mucho que lo quieren, tampoco lo ve imposible.
“Aún no he hablado con el profe Amado Guevara, pero sé que debe estar contento por verme acá en Saprissa y por todo lo que logró él. Ahora me toca hacer una historia diferente para estar a la altura de él”, concluyó.
Chirinos espera en una semana y media como máximo estar habilitado para que Vladimir Quesada lo tome en cuenta para las mejengas.