El técnico de Sporting, Luis Marín, habló este martes sobre Alexandre Guimaraes, estratega de Alajuelense, en la previa del choque de este miércoles a las 7 p. m., en el estadio Ernesto Rohrmoser.
Marín, quien fue su pupilo en los Mundiales del 2002 y 2006, no escatimó en elogios para Guima, pero dejó claro que su equipo quiere levantarse a lo grande... por lo que la Liga es la víctima perfecta.
Para nadie es un secreto que Marín es liguista desde la cuna, un hombre que sudó la camiseta rojinegra como jugador y hasta fue su técnico, pero este miércoles no hay amor por la Liga, solo ganas de tumbarla.
“Siempre lo he dicho, el profe Guima ha sido el caudillo de los entrenadores nacionales, el que ha estado a la vanguardia de todos, con más cartel porque ha disputado dos Copas del Mundo y ha dirigido en diferentes zonas”, aseguró Marín.
Pero tras los halagos, vino la advertencia, ya que Sporting quiere despertar y Alajuelense es el rival ideal.
Después de comerse un 4-2 en casa contra Puntarenas, Sporting necesita sacudirse, y Marín dejó claro que el duelo contra Alajuelense es la oportunidad perfecta.
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“Esperamos reponernos del golpe, ese día no nos salió nada, pero esa es la vida del deportista de alto nivel: pasar la página rápido y pensar en lo que viene”, afirmó.
Ideal
Y aunque su corazón siempre fue rojinegro, hoy no hay espacio para sentimentalismos. Si Sporting tiene que usar a la Liga como trampolín, lo hará sin dudarlo porque un buen resultado contra los manudos sería un golpe de autoridad.
“Nos fortalecería mucho, hay que tomarlo por ese lado también. Levantarse contra un rival como la Liga nos permite recuperarnos bien... eso significa ganar”, sentenció.
Sporting está fuera de la zona de clasificación, pero sigue con chances de meterse en la pelea. Marín respeta a Guima, pero su mensaje es claro: la Liga no la tendrá fácil.