Este fin de semana quienes asistieron al festival Connecturday en el Centro de Convenciones, en Belén, se toparon con un ring de lucha libre, pero ¿qué estaba haciendo algo así en una convención de videojuegos? Es una pregunta que muchos se habrán hecho al toparse con esta novedad.
En Costa Rica el fenómeno de la lucha libre está más presente de lo que muchos imaginan y eventos como estos son una muestra de ello, así como muchos andaba con camisetas de videojuegos, de superhéroes o personajes de animé y caricaturas, las del wrestling tampoco faltaron.
La empresa tica Riot Wrestling Alliance (RWA) ofreció cuatro shows de lucha, dos el sábado, dos el domingo, uno a las 10:30 a.m., y otro a las 4 p.m., este último fue grabado para transmitirse posteriormente en el canal TD Más.
Este es el tercer año que la promoción, como se le llama a las compañías de lucha, hace su show en el Connecturday. En el primero la gente pasaba, los veía un momento por curiosidad y luego seguían. El segundo se quedaban un ratito, veían una lucha y jalaban, dejando solos a los fieles que los siguen siempre.
Este sábado y domingo, las cosas cambiaron, ya que el show de la tarde mantuvo durante dos horas sentadas (cuando no se paraban para gritar o aplaudir) a casi cien personas y a muchas otras rodeando el ring viendo las maniobras, las piruetas y las llaves que guardan alguna relación a lo que han visto en empresas famosas como las de WWE.
LEA MÁS: Exluchadora de WWE viene a Costa Rica a demostrar por qué tiene un insólito récord en la lucha libre
“Venimos acá para tratar de expandir un poco el deporte, para que la gente conozca que en Costa Rica se hace lucha libre profesional y queremos hacerlo de lo mejor manera. Ya tenemos casi dos años de estar en televisión con TD Más, hacemos cosas con marcas para que la gente se involucre más. Estos eventos sirven para que la gente que no nos conoce pueda ver un poco el producto, se interese y vaya a dar a nuestras redes sociales y a nuestros shows en vivo”, comentó Káiser, una de las caras de la empresa, un luchador muy experimentado en la escena nacional.
La lucha libre es toda una puesta en escena no solo por armar un ring, hacer combates (jamás decir peleas, los fanáticos defienden que eso es algo muy diferente a luchar), sino irse en una historia y una trama, un luchador jamás le dirá su nombre de civil, pues eso mata al “kayfabe” o el universo que se crea en el que existen personajes, historias y rivalidades como si fuera un cómic con personajes de carne y hueso.
“La idea siempre ha sido posicionar a la lucha libre como algo más mainstream (popular) y eventos como estos nos han funcionado mucho para atraer nuevo público, para que se den cuenta de lo que hacemos”, dijo por su parte, Gabriel Arias, uno de los creadores de la compañía junto al Káiser, Klhan (otro de los luchadores) y Carlos Ernesto de La Rivera, nombre que se puso otro de los fundadores y que hace el papel del dueño de la empresa.
LEA MÁS: Luis Carlos Monge volverá a los cuadriláteros aunque aún tiene mala la rodilla
Los cuatro, más allá de sus papeles dentro de la compañía, se comieron el chicharrón de fundar una empresa para dar un espectáculo en diversos lugares de la Gran Área Metropolitana, especialmente y al mismo tiempo dar rienda suelta a una pasión que comparten con muchos ticos en el país.
“Fundar una empresa en Costa Rica es un proceso complicado, todo emprendedor lo sabe y lo seguirá diciendo y en el caso de la lucha libre es hasta un poco más, es un deporte no tradicional que muchos hasta lo ven con ojos de burla hasta que llegan y ven lo que realmente pasa y se dan cuenta de que no es teatro, que es lo que cree mucha gente.
“La gente ha respondido de una manera muy buena, el boca en boca es increíble, eso hace que la gente se involucre cada vez más y ha permitido que la empresa crezca de forma orgánica, requiere mucho trabajo, pero sí se puede”, destacó.
Un reto importante es cómo hacer que la gente que se los topó y los conoció gratis en una convención se anime a ir a comprar una entrada para ver uno de sus shows.
“Acá el tema es que el aficionado se vuelva recurrente, que nos conozca en un lugar como estos, pero que de pronto vaya a un show nuestro, empiece a consumir el producto y se haga fan. Entendemos que no todo el mundo lo hará, pero que al que menos vaya a algunos shows.
“Es importantísimo el vínculo que puedas hacer con un luchador, con una historia, con el producto en general. El año pasado, justo después de haber venido a Connecturday los siguientes dos shows que hicimos estuvieron llenos, nos pasó cuando fuimos otra vez a Cartago, poco a poco la idea es esa, hacer crecer esa fidelidad”, explicó Káiser.
Desde las redes sociales de la empresa allí se pueden dar cuenta dónde se realizan los shows, los precios y los eventos venideros, pues la lucha en Costa Rica jala más de lo muchos se imaginan.