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La espera valió la pena. El estreno de Lionel Messi no pudo ser mejor para el Inter Miami, que venció 2-1 al Cruz Azul mexicano en la jornada inaugural de la Leagues Cup, con un precioso gol de tiro libre de la estrella argentina, que cayó en tiempo de descuento.
El partido parecía dirigirse a la tanda de penales cuando Messi provocó una falta al borde del área.
El reloj señalaba el minuto 90+4 cuando el genio de Rosario colocó la pelota con cuidado, levantó la cabeza y disparó con efecto a la escuadra derecha del arco mexicano desatando la locura en el estadio DRV PNK.
La afición del Inter Miami pudo probar un adelanto de lo que le espera con el siete veces Balón de Oro entre sus filas, al igual que lo hizo una colección de celebridades que le siguieron desde la primera fila, como LeBron James o Serena Williams.
El equipo floridano empezó dormido ante un Cruz Azul que lo hizo todo mejor en el inicio del partido.
En la banda, el entrenador argentino Gerardo ‘Tata’ Martino gesticulaba tratando de imponer en vano un poco de orden en su zaga. Y los aficionados, que llenaron los cerca de 20.000 asientos del estadio de Fort Lauderdale (a 50 kilómetros de Miami), coreaban el nombre del jugador al que todos querían ver: “Messi, Messi”.
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El dominio del Cruz Azul llegó a ser aplastante en la primera hora, pero no logró concretar ninguna de las numerosas ocasiones, incluido un tiro al palo del argentino Carlos Rotondi.
En frente, el Inter Miami trataba de sacar provecho de los pocos balones que tocaba. Un par de jugadas de su extremo Robbie Robinson, el mejor del equipo en la primera parte, fueron la única esperanza de una reacción.
Esta llegó justo antes del descanso con una gran jugada del extremo finlandés Robert Taylor, quien recibió por la izquierda, amagó con desbordar al lateral contrario, regateó hacia adentro, aceleró y colocó un disparo pegado al palo opuesto al que no pudo llegar el portero azteca en el minuto 44.
De camino a los vestuarios, los jugadores del Cruz Azul, probablemente, se preguntaban cómo podían ir perdiendo 1-0.
Así estaba el partido cuando el equipo mexicano recordó cómo marcar un gol. En una jugada, en apariencia, poco peligrosa, el delantero Uriel Antuna recibió la pelota en el área, se dio la vuelta y lanzó un potente disparo a la red en el minuto 65.
Y entonces llegó la maravilla, la falta pegada a la escuadra, inalcanzable para el portero mexicano, y con la que revivía a un equipo que es último de la temporada en la MLS y llevaba 11 partidos sin ganar.
