Limón sacó un triunfo valiosísimo en su lucha por clasificar al vencer 1-0 a Saprissa y quedar a un punto de los morados.

Los limonenses llegaron a 15 puntos y los morados se quedaron en 16, ambos equipos con nueve partidos jugados.

Los verdiblancos mostraron orden y mucho coraje para asestar el golpe y dejar a los tibaseños con el ábaco en la mano para las próximas jornadas.

Aparte de los limonenses, otros que están brincando en una pata con el resultado son los cartagineses, que vuelven a ponerse cuatro puntos arriba del Saprissa.

El primer tiempo fue entretenido, sin más adorno. Sin ser vibrante, ni de ida y vuelta, el calor probablemente mermó esfuerzos y vimos 45 minutos a los que le faltó intensidad, pero no llegadas.

Ambos conjuntos tuvieron para irse al descanso con el marcador a favor, pero los porteros o la mala definición lo impidieron.

En dos minutos, Limón no supo aprovechar un pase comprometido del portero Aarón Cruz, que insiste mucho en hacer pases cortos a sus defensas cuando el rival asfixia.

Daniel Colindres, muy activo en los primeros 20 minutos, desbordó varias veces por la izquierda. La primera fue al minuto 5 cuando le puso un servicio a Mariano Torres, quien remató suave y fácil para Dexter Lewis.

Luego, al 11, Mariano Torres se la dio a Guzmán quien le dio un gran pase a Colindres, que ganó la posición pero definió mal ante el achique de Lewis.

Pero Limón tenía lo suyo, no solo lo intentó presionando al rival para ganar la pelota arriba, sino que encontró algunos espacios a las espaldas de los defensores morados, como al minuto 13, cuando Alexander Espinoza se la dio a Darryl Araya, quien debió controlar entre tres rivales y la entregó a Steven Williams, quien remató con chanfle la pecosa, pero el disparo salió ligeramente desviado.

El mismo Araya, al 22, en una salida larga del propio Dexter, enganchó hacia adentro, dejó botado a Barrantes y sacó un remate desviado.

Pero después del minuto 23 los morados se asentaron mejor y tuvieron buenas llegadas, como al minuto 24, cuando Dexter le hizo un tapadón a Hernández. El rebote quedó en Martínez, quien apenas punteó la pelota y dio en el poste.

Un minuto después, Barrantes sacó un latigazo espectacular que Dexter rechazó.

Después, al minuto 24, Guzmán incursionó por la derecha, centró, Colindres, de espaldas a marco, se la dio a Martínez quien remató flojo, otra vez, y el balón llegó mansito al experimentado portero.

La complementaria terminó con otro cañonazo de Barrantes, que Dexter volvió a mandar al córner.

Uno bastó

El complemento tuvo más intensidad, pero menos llegada y en ese pulso ganó la partida Limón, más entero, más claro, más picante. Saprissa resintió las bajas por selección, por expulsión y de viaje se le nota la falta de ideas.

Con un minuto de acción, Darryl Araya se perdió la anotación al pegarse al portero en un lindo pase de Johnny Gordon y luego, entre Rivera y Araya, a los 51 minutos, no supieron cómo resolver un contragolpe, cuando iban con ventaja numérica.

Limón tenía más posesión e incursionó por los costados, pero también se cuidó del Monstruo, apretando un poquito más a Mariano cuando tuvo la bola y cortando las conexiones que los morados pudieran tener con Colindres.

Al 67 llegó el estate quedito para el Monstruo, o sea, el gol. Nació en un tiro libre que ejecutó Marvin Esquivel y en el cual el chileno Carlos Soza se anticipó a todos y metió la pecosa al fondo de las redes.

Aunque el gol despabiló a Saprissa, pegó contra el orden defensivo de una Tromba que fue luchadora y que no dio una bola por perdida.

En una de las últimas jugadas, hasta Aarón Cruz se fue a buscar la opción del empate en un tiro de esquina, pero la bola pasó para otro lado.

Saprissa no pudo más y Limón sostuvo el marcador para conseguir esos tres puntos de oro y seguir en una alzada importante.