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Keylor Navas vivirá en un exclusivo barrio en la ciudad de Rosario, Argentina, tras su firma con el club Newell’s Old Boys, un residencial privado llamado Kentucky, en el que figuras como Lionel Messi también tienen su casa.
El lugar es el foco donde viven los famosos de la ciudad, otros futbolistas y exjugadores reconocidos como Maxi Rodríguez y Gabriel Heinze también tiene allí su residencia. Incluso, ese fue fue uno de los acuerdos del tico para llegar al club rojinegro.
El Club de Campo Kentucky, nombre oficial del lugar, está ubicado en Funes, ciudad vecina de Rosario y es tan pero tan exclusivo que hasta quiere independizarse del municipio que le corresponde, por las altas tasas de impuestos que le cobran.
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Según diversos medios, el precio de solo el lote en el lugar va desde los $200 mil (más de 100 millones de colones) para arriba, además de cumplir con diversos requisitos para el exclusivo sitio.
“Ya dentro, 240 hectáreas, de las cuales solo 90 son urbanizables, invitan al relax mientras se transita la añeja arboleda de sus calles -que llevan el nombre del tipo de árboles que hay en cada vía-, donde se alzan 500 viviendas, de diferente diseño cada una, y los espacios verdes con canchas de golf, de tenis o de fútbol”, destaca un artículo de la cadena Telemundo.
Para toparse con Messi, Keylor Navas deberá esperar las vacaciones o Navidad, épocas en las que va a la casa, según detallan sus administradores.
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A lo interno cuenta con absolutamente todas las comodidades necesarias que debe tener un Country (como le dicen en Argentina a este tipo de proyectos) y más, cuenta con canchas para diversos deportes desde tenis, gol, fútbol, baloncesto, entre otras, y más de 50 empleados que garantizan la seguridad, privacidad y tranquilidad del lugar.
El proyecto es tan monstruoso que por eso quieren independizarse, porque ni siquiera necesitan salir para hacer nada, según explicó una nota del diario La Nación de Argentina.
“Su particular ubicación geográfica hace que los moradores de Kentucky ni siquiera usen calles municipales para entrar y salir de sus hogares, puesto que están a la vera de una ruta nacional y la iluminación perimetral es aportada por la administración del barrio”, comentaron en el informe y agregaron: “Esta situación motiva que los propietarios de Kentucky Club de Campo paguen las expensas para costear los servicios comunes y además la tasa general inmuebles con costos elevadísimos para recibir casi nulos servicios por parte del municipio y los propietarios de los campos aledaños paguen también la tasa de Inmuebles rurales por nulos servicios”
Es decir, en Kentucky viven en su propia burbuja, otro mundo lejos de los “mortales comunes y corrientes”.
