La prensa deportiva tica es antipatriótica y enemiga de nuestra flamante Selección de Fútbol, digna de estar en el primer mundo del balompié, compitiendo, mínimo, contra Alemania, Francia y España.
Y no es justo que por culpa de los periodistas cuatro gatos llegaran al Morera Soto, cuando se dio el gran empate a cero ante Curazao, además de los otros cuatro gatos que vieron el empate a un gol ante la otra potencia caribeña, Haití.
Así lo señala nuestro excelso presidente de la FEDEFÚTBOL, Rodolfo Villalobos, quien con esas declaraciones irrespeta al aficionado, que sí sabe de fútbol.
¿No será más bien que el aficionado está cansado de usted, extesorero de Eduardo Li?
¿No será que el aficionado, al que se le suplica que vaya a los estadios, preferiría primero que usted rinda cuentas de su gestión y está cansado de tantos errores?
¿No será que el seguidor de la Sele quedó golpeado con toda la fiesta que Gustavo Matosas se pegó en el país y a quien nadie supervisó?
¿No será que el aficionado, traicionado por Gustavo Matosas, se sintiera doblemente traicionado cuando en la conferencia de prensa en la que el charrúa dijo que se iba por estar aburrido, usted lejos de alzar la voz y mandarlo al carajo, lo que hizo fue invitarlo a un "merecido" homenaje de despedida contra la Selección Uruguaya, al día siguiente?
Villalobos su imagen está deteriorada por sus propias falencias, no por culpa del pequeño sector de la prensa deportiva que no le es servil.
Gracias, al menos, por no llorar después del extraordinario empate ante Haití que nos clasificó como la peor selección de los cuatro grupos de la Liga de Naciones.