La famosa “Novia del Mundial”, la paraguaya Larissa Riquelme, estalló contra un periodista y lo demandó, al argumentar que “dañó su imagen”.
Según la guapa, el comunicador aseguró que ella defiende a un “supuesto violador”, ya que su esposo es acusado de violar a su ahijada.
“Empezamos con la querella a este señor Federico Fahsbender, periodista de Infobae. Nos vemos en tribunales. Me cansaste, me tienes harta”, escribió Larissa, mostrando la copia de la demanda contra el comunicador.
Larissa asistió como testigo al juicio que se le sigue desde hace más de dos años a su pareja, el futbolista paraguayo Jonathan Fabbro, quien militó en el Club Lobos BUAP de la Liga MX.
Riquelme recurrió a la justicia tras una publicación que hizo el comunicador, en donde reveló que la “exnovia del Mundial” intentó comunicarse con la menor que acusó a Fabbro de abusar sexualmente de ella.
“El mensaje fue enviado a un teléfono de H (madre de la menor) con el que su hija suele jugar videojuegos. “Amor mío”, dice el supuesto mensaje de Riquelme, con un emoji de corazoncito y la cara de una princesa. “Te amo”, concluye. El número del remitente en el texto es el mismo con el que Riquelme se comunicó varias veces con el autor de esta nota”, relata una parte de la nota escrita por Fashbender.
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En el material se menciona que presuntamente la modelo intentó acercarse a la familia querellante, para arreglar de algún modo un informe favorable a su pareja. Sin embargo, Riquelme sostiene que jamás intentó tal movida.
A temprana hora del pasado miércoles se le vio a la modelo en los tribunales de la calle Lavalle, en Argentina, sin hacer declaraciones a los medios de comunicación.
Poco quedó de la mediática Larissa, quien saltó a la fama durante el Mundial de Sudáfrica 2010 con un celular en el escote.
Sin palabras y esquivando las cámaras se le vio ingresar al edificio del Tribunal Oral Criminal No. 12 para sumar su testimonio. Como ella, también está previsto que declaren Martha Zabala, madre de Fabbro, y sus hermanos, Anabel y Pablo.
El jugador, de 35 años, enfrenta uno de sus partidos más difíciles: es acusado en Argentina por presunto abuso sexual con acceso carnal agravado a su sobrina de 11 años (hija de su hermano y exrepresentante, Darío Fabbro).
El jugador se declaró inocente y luego fue extraditado a suelo argentino para rendir su declaración y para que enfrente la causa que se le sigue. Fabbro espera que su inocencia sea demostrada en Argentina y señaló que de inmediato presentará la contrademanda.
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Según la legislación argentina, Fabbro se expone a una pena de hasta 20 años de prisión, en caso de que sea declarado culpable.
El exjugador también enfrenta en Paraguay una denuncia similar a que lleva en Argentina, esta por un presunto abuso de menor, quien también es sobrina de Riquelme.
Mientras la Selección de Paraguay se encontraba jugando en Sudáfrica, la modelo atrajo las miradas cuando seguía las acciones de su equipo. Fue tal impacto que causó que aunque se encontraba a miles de kilómetros de distancia, era un seguida por miles de aficionados, por su escultural figura. Una de sus últimas apariciones se dio en la pasada Copa América en Brasil.