Álvaro Saborío y el presidente de la de Fedefútbol, Rodolfo Villalobos, protagonizaron un curioso momento durante la premiación del campeón nacional, el miércoles anterior.
Entre todos los jugadores que el jerarca felicitó ese día, reconoce que con Sabo el asunto fue un poco más allá porque es a alguien a quien conoce de hace mucho tiempo y es el ídolo futbolístico de su madre, Elizabeth Montero.
"Con Álvaro me une una amistad de muchos años, mi mamá es su fan número uno, es la que en las graderías cuando alguien le grita algo, ella se levanta a defenderlo. En la premiación cuando venía él me pidió que le pusiera la medalla.
Fue muy emotivo para él y para mí, yo sentí que era ella la que le puso la medalla, iba con San Carlos en la final porque quería que fuera campeón, estaba muy feliz por él", indicó el jerarca
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Las cámaras de televisión enfocaron este miércoles como el presi hasta le agarró la cara al Chompipe, le sacudió la cabeza y le dijo algunas cosas que nos contó este viernes.
“Lo felicité, le transmití esa alegría que teníamos muchos, sé lo que pasó Álvaro, estuve cerca de él cuando pasó la lesión en Brasil, siempre nos mantenemos en contacto. Hablamos otra cosa, pero esa se queda ahí guardada”, comentó Villalobos.
A Rodolfo se le nota que le encantaría ver al goleador sancarleño vistiendo una vez más la camiseta de la selección nacional en la Copa de Oro, pero tiene claro que es una decisión que está en manos del seleccionador Gustavo Matosas y en la que él como jerarca no se mete.
“Álvaro tuvo una gran temporada y ojo que ningún jugador está descartado, ha dicho Gustavo, y Álvaro Saborío, le puedo decir, no está descartado, dependerá de la decisión del profesor Matosas”.