Escuchar¿Podría imaginarse una relación entre un equipo aficionado del este de San José con el guardameta costarricense Keylor Navas?
Es difícil imaginar un vínculo así, pero resulta que sí existe uno y de eso les vamos a hablar.
Se trata de un equipo que fue formado en 2015 por un grupo de amigos, que provenían de lugares como San Pedro, Guadalupe y Granadilla. Y fue en el 2023, con la contratación de Navas por el equipo inglés Nottingham Forest, que estableció un vínculo muy curioso.
El cuadro se llama el “Nottingham Miedo”, un vacilón nombre basado en el equipo inglés. Lo que nunca habrían imaginado es que Keylor Navas terminaría formando parte de ese histórico club.
El grupo de amigos tiene bien clara su función, que es mejenguear con la consigna de que son aficionados y que se divierten, con esa premisa hasta se burlan de ellos mismos. Pero ojo, cuando juegan van en serio, apelando a la capacidad del equipo.
Por esa particularidad, el club tiene hasta una canción que uno de sus integrantes, Andrés Saborío, compuso, grabó los instrumentos y cantó, que se llama ‘A ras de piso’.
La Teja habló con Alberto Pastor, presidente de equipo, quien fuera exjugador y que nos contó algunas cosas de este equipazo.
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- ¿Dónde juegan ustedes?
Antes de la pandemia, estuvimos en Linafa, en la región cinco, y luego de la pandemia nos pasamos a jugar a torneos privados. Ahora estamos en uno que se llama Torneo Futgol Zapote.
- ¿Cómo surge ese nombre tan particular?
La primera vez que los jugadores se reunieron para competir en Linafa se pelotearon los nombres en un bar (Virus), nos gustó este porque tenía varios significados. El primero, claramente, era de carácter divertido, después, era una invitación a los jugadores que jugaban en Linafa, de que se dejaran de varas y jugaran, sin miedo.
- ¿Y qué hay del equipo inglés, los inspiró?
El equipo inglés es más que famoso, de allí viene el chiste, el Nottingham viene en referencia al Forest.
-¿Cuál es la base del equipo? ¿Excompañeros de cole, un barrio, amigos?
Somos un grupo de amigos y es un grupo variado, hay de todas las edades, del grupo original quedamos como nueve, que somos profesionales, entre 32 y 34 años, y luego con la competencia hemos ido haciendo distintas amistades que se unen y contamos con nuevas promesas.
- ¿Han tenido en sus filas a exjugadores conocidos o alguna figura?
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No. Hemos tenido jugadores que pasan a jugar en segunda división, pero sin mucha trascendencia. Luis Miguel Valle iba a jugar con nosotros este año, pero le dio lo del corazón, es amigo de uno de nuestros jugadores. Estamos viendo si gestionamos la ficha de Darío Delgado.
- Desde que Keylor Navas llegó al Nottingham Forest, ¿han notado alguna repercusión?
No hemos tenido más retos, pero nos mandaban todos los links y noticias al respecto. Decíamos: ‘El Nottingham fichó a Keylor finalmente’. Todos nosotros estábamos metidos de lleno en las noticias y, además, se dio la circunstancia que un exjugador nuestro había ido a sacar un posgrado a Nottingham propiamente. No vio a Navas porque cuando ficharon a Keylor ya venía de salida.
- ¿Se hicieron aficionados del Nottingham Forest?
Sí, todos somos aficionados, antes de lo de Keylor, la mayoría tenía al Nottingham como una referencia, pero con Keylor somos más de ese equipo, además, la gente ve más nuestros partidos.
Es que, además, hace tiempo, cuando iniciamos, hicimos una campaña de redes sociales porque nuestro estilo es como de comedia, de reírnos de nosotros mismos. La idea es que cualquier equipo de fútbol aficionado, es eso, aficionado, y lo que se da es más amor que calidad. Hacíamos un noticiero y eso nos hizo llamar la atención de algunas personas y entonces sí tenemos aficionados más allá de novias, hijos, esposas y otros familiares que nos apoyan, por esa cosa de reírnos de nosotros mismos y no tomar el fútbol tan en serio.
- ¿Alguna anécdota?
Uhhhh... La primera vez que ganamos (2-1) lo hicimos contra un equipo extinto que se llamaba Chumpi FC de Granadilla. Ellos trajeron un uniforme igual al nuestro (rojo y blanco) para que nosotros no pudiéramos usar el propio y nos prestaron un uniforme viejo, añejo, usado, que era de Limón y nosotros con ese uniforme, que olía horrible, sacamos la tarea y ganamos.
Otra vez jugamos contra un equipo muy bueno, tenía a Yadel Balladares, un equipazo y nos iban metiendo 10 a 0, estábamos caldeados y el técnico decidió sacar a un delantero. Resulta que los ánimos estaban tan calientes que ellos terminaron peleando en el campo, pero luego, el delantero recordó que las llaves de su carro las tenía el entrenador y tuvo que volver con el rabo entre las patas a pedirle que le devolviera las llaves. Es la peor tarreada que nos han pegado.
