Luego de pasar una semana y media lejos de las canchas por lesión, Keylor Navas volvió al arco del Real Madrid en la victoria (3-1) ante el Girona en la Copa del Rey, único torneo en el que el meta pellizca minutos desde que Santiago Solari asumió las riendas del club.
El generaleño y los merengues lograron liquidar con éxito una serie que prácticamente estaba sentenciada luego de ganar 4-2 en el partido de ida, situación que le vino bien a los merengues, acostumbrados a sufrir durante esta temporada.
Durante la mejenga, quien lideró al cuadro blanco fue Karim Benzema, autor de un doblete que llevó a su equipo a las semifinales de este torneo por primera vez desde el 2014. Año que también fue el último en que ganaron ese trofeo.
El delantero francés se metió en el área para soltar un disparo con el que abrió el marcador (27′), antes de poner el 2-0 con un disparo cruzado (43′), mientras Pedro Porro ganó un mano a mano con Keylor para hacer el gol del honor de los local al 71′ y Marcos Llorente cerró la cuenta blanca con disparo cruzado al 76.
A pesar de lo cuesta arriba que estaba la serie para el Girona, el equipo sacó su orgullo y exigió Navas en diversas oportunidades, en las que el tico respondió como suele hacerlo, de muy buena manera.
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El cuadro local salió con intensidad, presionando al Real Madrid y buscando las llegadas por los costados para meter balones en busca de su goleador Cristhian Stuani.
El uruguayo puso en aprietos a Navas con un disparo prácticamente a bocajarro, que resolvió de buena manera el tico al 41′, pero antes Alejandro Granell había estrellado un balón en el poste, el Madrid pasó la tormenta y salió de buena manera.
Poco a poco, los blancos se fueron asentando en el campo y la conexión Vinicius-Marcelo empezó a llegar con peligro por la banda izquierda, mientras Benzema se convirtió en una pesadilla para la defensa rival con su doblete.
Cuando parecía más cómodo el Madrid, el Girona lanzó una rápida contra que culminó Porro ganando un mano a mano con Keylor para marcar el gol del honor local al 71′.
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El gol solo sirvió para dar una pequeña alegría a la afición local, que a los pocos minutos veía como Marcos Llorente soltaba un latigazo cruzado para poner el 3-1 definitivo al 76′.
El equipo blanco acumula ya cuatro partidos consecutivos ganando, con lo que poco a poco ha ido saliendo de meses sufriendo y el viernes estará en el sorteo de semifinales con el Barcelona, el Betis y el Valencia.