Luego de la derrota en Grecia, Alajuelense quedó más que comprometido para el domingo en el clásico nacional ante Saprissa.
Ese partido prácticamente podría definir el liderato del torneo.
El capitán de los erizos, Junior Díaz, dijo después de la derrota que su equipo seguirá peleando de cara a una mejenga, como esa del domingo, que se puso color de hormiga.
"Tenemos un partido muy importante para retomar esa distancia corta con ellos (Saprissa), estamos claros que hay que ganar para seguir con la opción de pelear ese liderato.
“Venimos haciendo las cosas muy bien y pensábamos sacar los tres puntos, no se dio, pero eso no nos quita la confianza ni baja el trabajo que hemos venido haciendo durante mucho tiempo”, destacó.
Junior comentó que por dicha el clásico está cerca, porque los motiva y siempre quieren ganarlos más allá de lo que se esté peleando.
Un detalle que Díaz considera que pesó este miércoles fue el estado de la cancha del Allen Riggioni, que estaba muy suave por el baldazo que cayó en Grecia.
"Nos complicó el terreno para el fútbol que queremos hacer, tuvimos que variar un poco, la cancha estaba complicada, pero ni modo, nos toca seguir.
“Con el gol tempranero ya se tiene que ir contra la corriente, tratamos de revertir la situación, tuvimos opciones, en eso estamos claros, pero no concretamos y debimos poner un poco de atención en la defensa en algunas jugadas”.