A Saprissa no le salió nada. Cayó este jueves 2-0 ante el Olimpia por las semifinales de la Liga Concacaf, regresa al país este viernes y el domingo será local ante el Herediano en un juego que no puede perder.
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Los inventos del rey Paté le costaron caro a los tibaseños aunque él no lo reconozca y más bien haya regañado a sus jugadores al final del partido.
Sobra decir que los futbolistas salieron cabizbajos de la cancha del estadio Olímpico Metropolitano de San Pedro Sula. No sabemos si fue por el regaño o más bien porque están cansados de las ideas que les vende el entrenador, quien al final no atina en nada.
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El primero en hablar fue el volante Mariano Torres, quien dijo a radio Columbia que deberán examinarlo para ver si la molestia que lo hizo dejar el juego ante el Olimpia es seria o no.
Después dio declaraciones Johan Venegas, quien dijo que tenían el control del juego, pero que les faltó concretar los goles. Nada más.
“Al final seguimos confiando, soñando con darle vuelta al marcador y pasar a la final”, comentó el Cachetón.
Sobre el hecho de estar en la suplencia indicó que no habían tenido descanso, que en algún momento el cuerpo lo resiente y que es buena la dosificación para el cierre de ambos torneos.
“El profesor (Centeno) apostó por algo, lamentablemente no nos salió, pero sabemos que en casa somos fuertes”, señaló el delantero.
El defensa Alexánder Robinson dijo que la serie está abierta y que tienen la capacidad para revertir esto. Además dijo que jugaron bien.
“El profesor confía en todos, todos tenemos la capacidad de jugar, tenemos la misma responsabilidad y si uno está o no, no debería perjudicar al grupo que haya cambios”, explicó en referencia a las variantes presentadas en la alineación titular.
Robinson indicó que antes del segundo gol del Olimpia jugaron bien en defensa y no incidió el cambio de planteamiento. Añadió que con el pitazo se dijeron palabras de aliento y lo que deben mejorar.
Del choque contra Herediano el domingo, a las 11 a.m., Robinson dijo lo obvio: deben ganar.