En Alajuelense espera que las broncas y tormentas que envolvieron al club en los últimos quince días en lo deportivo y administrativo finalmente acaben para ver si acaso pueden guardar el paraguas y sale el sol en el Morera Soto.
Agosto se suponía que era el mes vital en el calendario rojinegro, en el que tenían que sacar toda la leche y demostrar que venían fuertes tanto en el torneo de la Liga Concacaf y el campeonato local, pero toda la confianza se convirtió en dudas y reclamos.
En cuatro partidos disputados en este mes, los rojinegros suman tres derrotas (dos ante Olimpia y una ante Herediano) y un empate ante Santos el día de la inauguración de su gramilla híbrida, fiesta que fue desteñida a medias.
Al perder ante Herediano, los jugadores liguistas reconocieron que quedaron un poco golpeados por tanta cosa que se les ha venido encima, principalmente las derrotas, pero que darán vuelta a la página para reponerse
"La eliminación de Concacaf es un golpe para nosotros, claro que sí, queríamos llegar a la Liga de Campeones, pero tampoco podemos quedarnos en eso. Hay que levantar cabeza porque esto no para. Obviamente el camerino no está feliz, hay una tristeza que hay que convertirla en ánimo para ganar el otro domingo (ante Guadalupe FC)", dijo el defensor Seemore Johnson.
Para echarle más leña al fuego aparecieron todos los rumores, cuentos y dimes y diretes sobre el técnico Benito Floro y hasta el presidente, Fernando Ocampo, lo que enturbia peor el ambiente alrededor del equipo.
Algunos jugadores también sienten que desde afuera, para agravar la cosa, se busca enredar más las cosas con comentarios y rumores para fregarlos.
"Creo que se han lanzado muchas cosas para desestabilizar, si usted se pone a ver venimos con un progreso importante y tratan de buscar problemas donde no los hay y por eso se habla de más", comentó el defensa Jameson Scott.