Emily Mongrillo, una estudiante de 14 años no vidente, sobrepasó las expectativas en el torneo de ajedrez en el que participó este jueves, en los Juegos Estudiantiles en el polideportivo de Montserrat de Alajuela.
La campeona manuda debutó en este tipo de torneos, pero lo hizo ante estudiantes que sí ven.
Su profesora Mauren Suárez dijo que su alumna logró quedar tablas en dos partidas y que en las partidas que perdió, igual dio la pelea. No se la puso fácil a sus contrincantes.
La verdadera campeona quedó muy contenta con su participación y hasta dijo que repetiría la experiencia.
“Fue muy bonito, en serio me gustó mucho participar, socializar con los jugadores. Me gustó mucho porque logré entablar una buena amistad con la gente vidente que estaba jugando conmigo, hubo una bonita relación”, expresó.
La gran campeona dijo que le gustó tanto que ya está esperando que le digan cuándo es la próxima competencia. “Estoy entusiasmada, sí me gustaría repetir, volver a jugar”, contó a La Teja.
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Para Suárez, lo más hermoso de la experiencia de Emily fue que le dijo que gracias a esa experiencia pudo hacer cuatro nuevos amigos.
“Al inicio estuvo nerviosa, más que todo cuando llegamos, porque sentía que todo el mundo se le quedaba viendo. Estaban todos los coles y escuelas. Además, tenía que usar un reloj y aunque le explicaron, estaba nerviosa, pero cuando hizo su primera partida y como vio que a la muchacha le costó, eso la hizo sentirse con más fuerza”, explicó la profe.
Esa primera rival se llama Naomy Millape Chaves y dijo que le gustó la experiencia de enfrentar a Emily.
“Me gustó porque nunca había jugado contra una persona no vidente, fue bonito, le tuve que ayudar un poco, ella me preguntaba y esas cosas, pero fue una experiencia muy bonita”, dijo Millape.
La profesora añadió que, en términos generales, Emily se sintió muy bien y lo más importante es que estaba deseosa de vivir la experiencia.
“Estaba muy contenta, satisfecha, porque ella me indicó que a los rivales les costó ganarle, no fue de una vez y porque hizo nuevos amigos.
“Yo le dije que estaba muy orgullosa de ella, que dio un gran paso y que está abriendo camino. Este es el inicio de un camino de muchos éxitos y triunfos que va a tener en la vida. Más adelante podrá competir contra no videntes, igual que ella”, manifestó Suárez.
La profe dice que, incluso, Emily estuvo a punto de ganar una partida, pero la perdió por el tiempo, quizás por la falta de costumbre con el reloj.