Siempre aguerrido y luchador, José Miguel Cubero se elevó entre los defensores rojiamarillos y con un cabezazo le dio tres puntos de oro a Alajuelense ante Herediano.
Su tiro dejó congelado a Esteban Alvarado, quien tenía todos los puntos para ser la figura del partido y mantiene a su cuadro en la punta.
Cubero respetó su pasado herediano, la casa de don Eladio fue la suya por muchos años, razón suficiente para no gritar el gol, el volante solo se hincó y se lo dedicó al de arriba.
Ya son cuatro pepinos los que registra el volante de contención en este alegre camino que llevan por ahora los erizos hacia el título 30.
Incluso, al terminar la mejenga, cuando Cubero se dirigía al túnel del Rosabal, los aficionados corearon su nombre.
LEA MÁS: ¡Liga campeón, Liga, Liga, Liga campeón! La 30 cada vez está más cerca
“Importantísimo el gane, uno de los lugares donde es complicado jugar, un rival con grandes jugadores, desde el primer minuto la Liga mostró que tenía que ir adelante, que quería ir a sacar todo acá”, señaló el futbolista que este domingo se puso traje de goleador.
“Yo trato de hacer las cosas bien esté donde esté, tenemos que lograr este campeonato, estamos pensando en esto, y para eso trabajamos todos los partidos, tenemos siete u ocho finales para asegurar ese primer lugar y una final”, agregó.
José Miguel ratificó que el León se siente sólido, van con todo y los resultados los están respaldando.
“Poco a poco vamos consiguiendo el objetivo sin adelantarnos a las cosas”, indicó.
El que lamentó no haber concretado fue Jonathan McDonald, quien pudo anotar en el primer tiempo y no hacer tan sufrida la mejenga.
“Rescatar la fuerza y pundonor del grupo, veníamos de un partido no tan bueno, donde siendo sincero no merecíamos ganar, como lo dijo el profe, eso tienen los equipos grandes, tienen que ganar como sea”, explicó Bigmac.