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La amenaza de los futbolistas de Limón de no presentarse a jugar el domingo, ante Saprissa, debido al atraso en el pago de salarios , no estresa a Jorge Castillo, administrador del equipo desde el pasado 4 de julio.
–Nuestra administración es respetuosa de los derechos de los jugadores, si de la época del señor Viveros les deben cinco o más meses de salarios,los apoyamos si juegan e igual sino juegan; deben enfrentar al señor Viveros y cobrar.
Incluso, pidieron ayuda a la Asociación de Jugadores Profesionales (ASOJUPRO).
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Ante esto, Dennis Viveros, quien dice fue el administrador caribeño hasta hace mes y medio,aseguró tener amigos asiáticos dispuestos a invertir en el equipo siempre que Castillo jale este miércoles.
No obstante, Jorge contestó que solo se irá si se lo pide Carlos Pascal, dueño de Limón F.C.
A Castillo le enviamos las siguientes preguntas vía correo electrónico y esto contestó.
–¿Qué van a hacer ante el anuncio de los jugadores de Limón que han dicho que si no les pagan, no se presentan a jugar ante Saprissa el domingo?
–Nuestra administración es respetuosa de los derechos de los jugadores, si de la época del señor Viveros les deben cinco o más meses de salarios, los apoyamos si juegan e igual sino juegan; deben enfrentar al señor Viveros y cobrar.
En cualquier caso no es nuestra deuda, nosotros asumimos el 4 de julio.
–¿Cuánto dinero les adeudan?
–Lo desconozco, lamentablemente no hay récords, no hay recibos de pago, no hay contabilidad; esa es la cara de la administración del señor Viveros.
–¿Es cierto que las deudas del club ascienden a los ¢200 millones?
–Sí, definitivamente esa es la deuda del señor Viveros en sus 10 meses de administración.
–¿Qué sabe usted sobre Dennis Viveros, exadministrador del equipo, quien dice tener amigos inversionistas que quieren ayudar a Limón pero que para hacerlo usted se debe ir del club?
–Que es un gran hablador, decir es una cosa, traer los documentos, carta de intención, carta que conozca a su cliente, carta de prueba de fondos; nada de eso posee, es un gran hablador.
Si alguien quiere comprar Limón le paga al señor Pascal, él hace un acuerdo conmigo, él me ordena irme y todos felices.
