A Javier Delgado, gerente deportivo de Alajuelense, siempre le hemos admirado su caballerosidad, su don de gente y especialmente eso que se ha perdido tanto y que él mantiene: la palabra.
Sin embargo, este lunes, durante la presentación de Luis Diego Arnáez como técnico manudo para lo que resta de la cuadrangular, nos quedó debiendo ante una pregunta que le hicieron a Fernando Ocampo, presidente rojinegro, y que Delgado terminó contestando.
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El periodista Esteban Oconitrillo, del programa "Tertulia Deportiva", atinadamente le cuestionó al presidente, que si después de cambiar tanto entrenador (Arnáez es el quinto de Ocampo en un año y 4 meses al frente del equipo y el décimo desde que jaló Óscar Ramírez), no había que mirar al camerino para buscar ahí la causa para tanta salida de técnico y tantos malos resultados, en referencia a los futbolistas.
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Ocampo, fiel a su estilo político, dijo lo que siempre comenta cuando cambia de técnico: "Al final del torneo se verá el tema".
Ahí fue cuando Javier metió la cuchara y dijo que desde que Óscar jaló, en el 2015 hasta la fecha, se han cambiado muchos jugadores, como dando a entender que esa no es la razón.
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No sabemos si es su respuesta porque él fue técnico de diciembre del 2015 a mayo del 2016 cuando perdió al final ante el Team y siempre ha dicho que, al menos a él, nunca le pasó que los futbolistas mandaran en el camerino como lo denunció José Giacone, en agosto del 2016, cuando renunció al banquillo manudo.
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La realidad es que del 2015 a la fecha siguen en el club jugadores como Patrick Pemberton, Jonathan McDonald, Christopher Meneses, José Salvatierra y Pablo Gabas, por citar a los más viejos y que precisamente son de los cuestionados por su rendimiento en los momentos de estos años de vacas flacas manudas.