Horacio Elizondo, nuevo presidente de la Comisión de Arbitraje o del cuerpo técnico arbitral, como ahora bautizaron al departamento en la Fedefútbol, tardó apenas minuto y medio para sonarse al grupo de árbitros que se hizo llamar Los Lobos en el fútbol costarricense.

Al argentino le consultaron sobre este grupo que anda por su lado, tiene sus propias redes sociales y en un momento puso a hablar a dirigentes, analistas y hasta árbitro en el balompié nacional.

Con mucha seguridad, vehemencia y tranquilidad en sus repuestas, el sudamericano tuvo su primer encuentro con la prensa costarricense. Su figura es muy conocida en el mundo entero por su trabajo en el campo.

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En el mundial Alemania 2006 dirigió el partido inaugural entre los locales y Costa Rica y la final entre Francia e Italia, en la que expulsó al capitán galo, Zinedine Zidane.

Elizondo afirmó que conoce todo lo que rodeó al tema y espera que no sigan trabajando por su lado, sino que actúen con “una actitud más madura”.

“Me parece es un comportamiento muy infantil. Es como con nuestros hijos, cuando algo no anda muy bien, nuestros hijos a veces tienen comportamientos no adecuados por llamarlo de alguna manera y que hacen llamar la atención de los padres, decir algo está pasando.

“No quiero hacer un juicio de valor de este grupo, pero sí es un llamado de atención. Ayer tuvimos una reunión con los árbitros de primera y segunda y les conté que acá todos somos nosotros, cada cosa que haga cada uno involucra al resto, así que esas cosas tendrían que quedar en la intimidad, no en lo público”, comentó.

Don Horacio explicó que no analizar lo que implica hacer público este tipo de grupos muestra esa inmadurez de la que habla, lo cual señaló como un error.

“Creo que también les toca darse cuenta adonde pertenecen o están y qué implicaciones pueden tener en ciertas cosas, desgraciadamente o afortunadamente para el arbitraje siempre hay que ser y parecer, porque sino eso hace un ruido y otro ruido que provoca un ruido a lo externo adonde se arrastra a mucha gente que no tiene absolutamente nada que ver.

“Vos me hablás del grupo de Los Lobos, pero el grupo de Los Lobos arrastra a todo el resto del arbitraje, para la gente empiezan a ser todos lo mismo y no es todo lo mismo y bueno, por eso bueno, creo que es un pecado de juventud”, profundizó.

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Todos al mismo nivel

En el discurso de Elizondo es claro que poner a los árbitros al mismo de profesionalismo que los jugadores y equipos es una prioridad, porque si una parte como los futbolistas lo es, la otra también tiene que serlo, sino para él la ecuación no funciona.

Allí es donde lo primero que le pidió a los réferis es compromiso y comportarse a la altura de las circunstancias, sino las cosas no van a funcionar.

“Voy a representar lo que vamos a hacer como si fuera un equipo de fútbol y mi representación es ser el director técnico de ese equipo. Seré el máximo responsable y también estaré en un montón de cosas, como hacer algo de la parte administrativa, política e institucional. Vi tres partidos y estoy analizando un poco la estructura de lo que hay aquí y estamos en eso, analizando.

“Se los dije a los árbitros, que debemos ser un equipo, se acabó el show, o él, somos nosotros. Me encantaría profesionalizarlo, falta establecer un diagnóstico con los árbitros para empezar un proyecto. No quisiera ser apresurado y todos están deseosos de que los traten como profesionales, les den las herramientas y lo traten como profesionales”, comentó.

Elizondo de momento trabajará con Jeffry Solís como coordinador arbitral y Mario José Araya como parte de sus asistentes y en unos meses definirá si más personas se integrarán a su equipo.