En un mes al frente de Alajuelense, el técnico Hernán Torres no solo ganó más canas, sino que dejó en evidencia a la directiva manuda, encabezada por Fernando Ocampo.
El presidente de los rojinegros indicó que tenían un equipazo para ser campeones y en 12 fechas son séptimos, con la clasificación muy lejana.
Ocampo juraba haber armado un cuadro lo suficientemente robusto para alzar la 30 en el semestre del centenario.
“La Liga tiene un equipo para que podamos hacer un boom deportivo y lo que esperamos es que cada jugador responda de conformidad”, señaló el señor a La Nación, el 7 de febrero.
No obstante, el colmillo, la experiencia y los conocimientos deportivos de Torres lo hicieron darse cuenta rapidito que aquello del equipazo era falso.
Torres llegó a la casa manuda el 1 de febrero, ante el despido de Luis Diego Arnáez, con un grupo de jugadores que él no armó y al que no le podía hacer incorporaciones porque estaba cerrado el periodo de inscripciones.
Una semana después de su arribo, tras caer ante Pérez Zeledón y Grecia, el cafetero no se anduvo por las ramas y aseguró que los manudos no tenían un palito en cosecha.
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"En cuanto a la plantilla extensa, no creo que sea tan extensa. Hoy en día no tengo lateral derecho, hoy en día está jugando (Allan) Miranda y no tengo quién lo reemplace si se llega a lesionar, por ahí hay dificultades y complicaciones, tengo lesionado a (Luis) Sequeira, a (José) Salvatierra.
“Por la izquierda tengo a (Cristopher) Meneses, el otro (Daniel Villegas) está lesionado, ¿entonces? yo diría que no es tan extensa, no es tan extensa la nómina, sí hay muchos jugadores de mitad para adelante, hay muchas alternativas, pero atrás no tengo tantas”, indicó el sudamericano el 8 de febrero.
El tapón explotó este domingo, luego de empatar a dos ante la UCR y perder por lesión a Jonathan Moya y Marco Ureña.
"Las lesiones y expulsiones influyen, no esperaba esto, estar sin laterales, sin recambio, las lesiones, expulsiones, lo que ha pasado, que la Liga esté en deficiencia de puntos; estoy sorprendido con lo que me encuentro.
“Ha sido muy complicado, muy complejo, muy difícil, hoy hay tres bajas. Ya no tengo casi nómina, es muy complicada la situación”, señaló Torres.
Curiosamente, Ocampo no pensaba así el 7 de febrero.
“José Andrés Salvatierra el lunes se mete a entrenar, Christopher Meneses ya está de vuelta y bueno, el equipo tiene suficiente material para hacerle frente al momento en el que alguien se lesiona, eso es parte de la jerarquía y la casta que se tiene que tener. La Liga no depende de uno o dos jugadores, es una institución con muy buen material humano que debe poder suplir a alguien cuando se presentan las vicisitudes de las lesiones”, indicó Ocampo en aquel entonces.
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Sin embargo, así no piensa el cafetero, al que le quiebran la cabeza las lesiones de Marco Ureña y Jonathan Moya, Porfirio López, Allen Guevara, José Salvatierra, Cristopher Meneses, Esteban Marín, Daniel Villegas y Luis Sequeira.
Si analizamos el tema, la debilidad de la Liga fue no contratar suficientes defensas y laterales, piezas urgentes desde el torneo pasado. Solo trajeron al hondureño Henry Figueroa, el cual juega como lateral porque no hay.
Sequeira y Salvatierra están lesionados desde el año pasado y Marín no venía jugando e igual se fracturó en un entrenamiento este año.
Los que sí jugaban eran López, Guevara, Villegas y Meneses, todos lesionados este campeonato, demostrando que la mala planificación ha hecho que la Liga se quede sin equipo y Dios guarde se lesione Patrick Pemberton, porque apague y vámonos.
De las incorporaciones para este torneo, Anthony López y Ariel Lassiter jugaron los últimos juegos como titulares, pero parece que es más por el hueco que quedó que porque fueran la primera opción del entrenador.
¿Qué decía Ocampo?
Ante el oscuro panorama manudo y la realidad que desnudó Torres, nos dimos a la tarea de buscar las frases dichas por Ocampo a inicios de este año, cuando estaba seguro que con el equipo que armaron, estaban sobrados.
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"El objetivo es el campeonato ahora en mayo, sin duda alguna”, comentó el directivo en una entrevista en La Nación, el 6 de enero.
Para él, la Liga no tenía pretextos para no alzar la copa este semestre. “El equipo tiene todas las condiciones, se ha reforzado y no es aceptable el rendimiento, ni el momento que estamos viviendo en la tabla de posiciones”, declaró el abogado el 7 de febrero.
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“El centenario es una fiesta del liguismo, en el que celebramos cien años de historia y los muchachos tienen la presión de salir campeones a como la tienen los futbolistas de Herediano y de Saprissa, porque se armaron planillas para pelear el campeonato”, señaló el presi.
Para él, Alajuelense no podía tener un mal rendimiento porque “el equipo viene trabajando junto, fuimos el equipo que hizo más puntos en el torneo pasado, es el mismo equipo con incorporaciones, que solo deberían venir a sumar”.
Según el directivo, no podía entender cómo había un “cambio de circunstancias” del torneo anterior cuando llegaron a la final de la segunda fase, a lo que viven ahora.
“Hemos tenido momentos difíciles, pero se conformó un gran equipo, una gran planilla, que el equipo venía haciendo las cosas bien y que tiene que salir de este bache ya”, señaló Ocampo el 7 de febrero.
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Mencionó que el mal rato de la Liga no era un problema de entrenadores ni condiciones, porque eran el equipo centroamericano que ofrecía las mejores condiciones como institución deportiva.
El tiempo y Torres demostraron otra cosa.