Para el Herediano el cierre del torneo de Clausura está bien rudo, ya que está obligado a no perder puntos y tiene pendiente tres mejengas bastante exigentes.
El Team llega con la obligación de sumar este domingo en el Fello Meza ante el Cartaginés, luego deberá enfocarse de inmediato en la S, ya que el próximo miércoles recibirá en el Rosabal Cordero al Saprissa, que tampoco tiene nada seguro y deberá llegar con todo su arsenal.
Luego se verá las caras con Guadalupe y Santos, antes de medirse a otro de los grandes, Alajuelense el próximo 20 de abril en el Morera Soto. Herediano finalizará la primera fase en casa ante Pérez Zeledón, actual líder del torneo.
“Dependemos única y exclusivamente de nosotros, ya estamos cerca del cuarto lugar y estamos trabajando para sumar. Ahora se viene el partido contra el Cartaginés que será otra final, como todas las que hemos jugado hasta la fecha para clasificar", expresó el técnico rojiamarillo, Jafet Soto.
El boleto rojiamarillo empezaría a tomar forma este domingo contra el Cartaginés, rival directo por la cuarta posición y el próximo miércoles en el Rosabal Cordero, ya que de ganar ambos juegos llegarían a 31 puntos, tema que los acercaría a la siguiente fase del campeonato.
Para Jafet esas victorias serían verdaderas minas de oro para los pupilos de Jafet Soto, porque golpearía a los brumosos, dejaría sin el liderato al Sapri y hasta podría casi fuera de la pelea a la Liga que también tiene aspiraciones de clasificar.
Para el técnico Herediano, todos los aspectos se han cuidado al máximo para este cierre tan exigente y en el que no pueden confiarse.
“Estamos muy bien en el aspecto físico, tomando en cuenta todos los partidos de la temporada, lo cual refleja que el trabajo de los preparadores físicos es excelente. En este momento los de arriba (en la tabla) no tiene nada asegurado y por eso seguimos de cacería”, dijo Soto.
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Con este panorama, los dos juegos de reposición del Team ante el Monstruo y el León son claves para sus intereses y para tratar de revivir lo que hicieron el torneo anterior, en el que prácticamente estaba eliminado, clasificó y salió campeón.
La moneda está en el aire para los rojiamarillos, quienes deberán demostrar ante tres de sus rivales de más peso de qué están hechos para pulsear una clasificación que hasta el momento se la ha complicado bastante.