Herediano abrió este martes las puertas de una vivienda que acogerá a sus jóvenes promesas.
Se trata de la Casa Don Pedro, que presentó en conjunto con la empresa de arroz y frijoles de ese mismo nombre, la cual servirá de hogar para los jugadores de zonas alejadas que no tengan un sitio para quedarse y donde se brindará una formación deportiva, educativa, social y personal.
La Casa Don Pedro está 25 metros al oeste y 100 al norte de la Mutual Alajuela de Heredia, en el puro corazón de la Ciudad de las Flores, puede albergar a 20 futbolistas y cuenta con tres habitaciones, dos salas, cocina, sala de estudio y jardín.
“Para Herediano, la Casa Don Pedro representa la puesta en acción de nuestra identidad como marca deportiva. Nos llena de orgullo y agradecimiento presentarla a nuestra gran afición, así como a la sociedad en general. La Casa Don Pedro es un lugar diseñado estratégicamente para potenciar el proceso de formación integral de nuestros jugadores juveniles, con un alto sentido humano, privilegiando el desarrollo del deportista como parte del proceso de transformación del ciudadano”, explicó Jafet Soto, gerente general del Team y entrenador del primer equipo.
La ubicación de la casa es muy estratégica, ya que no solo está cerca del estadio sino que hay centros de estudios muy cerquita.
Pablo Salazar, asistente de Soto, expresó que la vivienda puede ser vista como el inicio de una transformación de las divisiones menores del club.
“La Casa Don Pedro es un lugar diseñado estratégicamente para potenciar el proceso de formación integral de nuestros jugadores juveniles”, Jafet Soto, gerente general del Herediano
“Es una transformación humana y como deportistas, en miras al futuro de nuestro país y del club, nos sentimos demasiadamente orgullosos con este gran inicio”, dijo.
Don Pedro pondrá nutricionistas a disposición de los jugadores para que tengan una alimentación balanceada y lleven su rendimiento al siguiente nivel.
“Desde el año pasado decidimos enfocar nuestros recursos al desarrollo integral de jóvenes, tanto en la parte mental, como educativa, moral y espiritual a través del fútbol. Estamos seguros de que el deporte potencia habilidades de formación y nosotros como empresa damos lo mejor para que crezcan como profesionales y seres humanos”, explicó Mónica Castro, encargada de mercadeo de arroz y frijoles Don Pedro.
Alejandro Sandoval, uno de los muchachos beneficiados con el proyecto, dijo que estar en un club tan grande como Herediano es una gran felicidad para él y su familia.
“Ya por estar acá, uno siente el amor por la camiseta. Cuando llegué al club fue la mejor experiencia que tuve.
“Es importante este lugar (la casa) porque es una ayuda económica para mí. Es una ayuda para trasladarme, es un lugar cómodo y para el estudio, más que todo”, dijo el joven, de Pérez Zeledón.
Sandoval vivía en Mercedes Norte y cuenta que antes de la vivienda florense, generalmente debía trasladarse en taxi, por lo que ahora se ahorrará esa platica, lo que sin duda es un alivio.
Por su parte, John Ruiz, otros de los muchachones que vivirán en ese hogar rojiamarillo, dijo que apenas supo que llegaba a un club grande, se motivó y aprovechó la oportunidad.