Un espectacular cañonazo de Marvin Angulo, al minuto 77, le dio un importante triunfo a Saprissa sobre Sporting 1-0, este domingo en el estadio Cuty Monge, en Desamparados.
Jimmy Marín desbordó por el sector izquierdo, se quitó un par de rivales, vio a Angulo bien ubicado y le pasó la pecosa. Marvin, quien confía mucho en esa pierna derecha, controló, apuntó y sacó un cañonazo espectacular, al que el portero Carlos Méndez le llegó, pero no pudo desviar lo suficiente para evitar el gol.
El pepino valió el boleto por la buena jugada de Marín y la ejecución perfecta de Angulo, pero morados y josefinos quedaron debiendo mucho al espectáculo.
Basta decir que la jugada más peligrosa de la inicial fue provocada por el árbitro central Cristian Rodríguez debido a un error garrafal, en el minuto 45.
Randall Azofeifa iba a ejecutar un tiro libre en el centro del campo y Mariano Torres no guardó la distancia, es más, trabó la bola en la ejecución y esta le quedó a Angulo. Rodríguez tenía que pitar la obstrucción, pues el argentino no guardó la distancia y no dejó ejecutar, pero este dejó seguir la jugada y Angulo se la dio a Medina, por la izquierda e hizo un par de amagues antes de rematar, pero le pegó horrible y su remate salió muy elevado. Respiró hondo el Sporting, pero sobre todo el silbatero porque si la S hubiera anotado se metía en un broncón.
Si eso fue lo más peligroso del encuentro, imagínense el resto. Fue un partido para el olvido, con dos equipos con buenas planillas, pero que se anularon y brindaron un concierto de bostezos que no fue jugando.
Además, y como otro punto negativo, la barra de la Ultra se hizo presente en el Cuty Monge, lo cual no fue del agrada para muchos.
Saprissa necesitaba ganar para seguir subiendo en la tabla y no quedarse estancado, pero fue un equipo sin picante, sin sal, sin emoción. Muy plano.
A pesar de contar con Mariano Torres y Marvin Angulo en el medio campo y Víctor Medina y Jimmy Marín atacando por los costados, los morados no tuvieron un buen día en ofensiva.
A Sporting también le costó. Randall Azofeifa pasó desapercibido y hasta el bueno de Luis Flores, quien siempre se saca algún as bajo la manga, se contagió de esa desidia que tuvieron los protagonistas. Harry Rojas y Giovanny Clunie también parecían fantasmas dentro del campo.
Lo mejor del partido fue el duelo que se tuvieron Barlon Sequeira y Gerard Taylor por la banda izquierda del ataque del Sporting y el de Clunie frente a Kendall Waston, ya que ninguno se arrugó y disputaron con mucha garra cada balón.
Fueron contadas las opciones de gol en el juego y pasaron 19 minutos para tener algún apunte en la libreta. Fue una jugada por la derecha, de Saprissa, donde Francisco Divino Rodríguez se la dejó riquísima a Mariano Torres quien le dio de seguido, colocada, pero salió ligeramente desviada.
Sporting respondió de la forma que mejor sabe hacerlo, con la bola quieta de Randall Azofeifa quien se la puso a Joaquín Aguirre al minuto 23 y remató de cabeza, pero Aarón Cruz controló en dos tiempos.
Antes de que la gente se muriera de aburrimiento, Marín corrió por la derecha y se la pasó a Medina. El pana hizo la diagonal de afuera hacia adentro, con amagues pero se le cerró el ángulo de remate y se la tuvo que dar al Divino quien controló y sacó un remate rastrero y cruzado que el portero Carlos Méndez controló.
Carlos Méndez se lució con un tiro libre espectacular de Marvin Angulo, en uno de los pocos chispazos del volante morado.
En el complemento, el árbitro Rodríguez tuvo otro error, pero de apreciación, cuando Joaquín Aguirre derribó dentro del área al panameño Medina que estaba haciendo loco y que fue lo mejor del partido, pero el juez central no señaló el manchón blanco. Al final, la pecosa le quedó a Marín, quien le metió un patadón pero la mandó a las gradas, muy congruente con la calidad del partido.