Uno de los motivos por los que el argentino Pablo Izaguirre es tan recordado en Alajuelense, se debe a su estilo de juego atrevido, sin miedo de encarar en el uno contra uno y hacer con la pecosa lo que otros no se atrevían o no podían.

Por eso, el che disfrutó muchísimo del gol de Carlos Mora ante Puntarenas FC este domingo, ya que vio un poco de esa valentía y ese fútbol que cada vez se ve menos debido a los diversos factores que pasan actualmente en la cancha.

La anotación de Morita le hizo recordar a Iza, uno que se jaló el 11 de agosto del 2002 ante Guanacasteca, en un partido que los rojinegros triunfaron 8-2 en el estadio Morera Soto, ya que también agarró el esférico y se quitó a todos los rivales que se le pusieron enfrente.

“En el mío inicié un poquito más atrás, en este él entra al área, hace un giro, así que el suyo tiene esa connotación, porque a su alrededor tenía muchos más jugadores, eso es lo que los hace diferentes, pero la esencia es esa, de ir para adelante”, destacó.

Para Izaguirre, la gran virtud de este tipo de goles, que se ven muy poco, es la confianza que debe tener el jugador, sin el temor de pensar si le van a quitar la bola o lo vayan a regañar.

“Carlos se tiene mucha confianza, por eso lo hace. Quizás hay otros jugadores que tienen muchas condiciones y que lo pueden hacer, pero ya a la hora de enfrentar el uno contra uno o ir encima de dos rivales les cuesta más, lo pueden hacer, pero les cuesta creérsela y enfrentar. Eso es lo que tiene Carlos, le gusta el uno contra uno, ir para adelante.

“Estos son goles de potrero le decimos los argentinos, de jugar en las plazas, en los parques, a veces se pierde mucho este estilo porque a los técnicos les gustan mucho los jugadores que sean muy tácticos, por eso casi que la figura del número diez ha desaparecido, se busca otro tipo de jugadores”, dijo.

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Resucitó la gambeta

Tomás Fonseca, otro argentino que militó en el fútbol nacional y hoy es comentarista de Tigo Sports, analizó el gol desde la parte técnica, dado que ya no es fácil verlos en el fútbol moderno.

“Yo no es fácil ver en el fútbol moderno a jugadores que gambetean, que se saquen a uno, dos o tres jugadores de encima y ni qué hablar cuatro. El gran diferencial que le añade Carlos a esta jugada es que la termina con gol, acá se unen las dos cosas, es una muestra de talento, con efectividad.

“No es una jugada como otras, es una exposición de su técnica porque realmente tuvo influencia en el juego y en el marcador”, añadió.

Al igual que Izaguirre, Fonseca utilizó el término potrero, expresión muy argentina que es equivalente a decir goles de mejenga, cuando los chicos juegan solo por diversión y se atreven a hacer cualquier cosa sin presión o temor alguno.

“El fútbol moderno ha prescindido de estos jugadores, hay posturas sistémicas que dicen más pase y movilidad, atacar de forma colectiva y no individual, porque para hacer eso hay que tener jerarquía y las condiciones y en este caso, Carlos demostró sus condiciones.

“Más que una rareza, este tipo de goles son una excepción en un fútbol que cada vez encuentra menos potreros, como se dice en Argentina, menos atrevidos que provoquen el uno contra uno, el desequilibrio que a la gente todavía le gusta ver en el fútbol”, finalizó.