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Abrir los estadios a las barras bravas es un tema en el que los clubes de la primera división deberán ser sumamente cuidadosos y seguir al pie de la letra lo que les indique la Fuerza Pública, así como una ley que se creó para prevenir los actos de violencia en los estadios.
En julio del 2020 en Costa Rica se aprobó la Ley 9145 que establece la prevención y sanción de la violencia en eventos deportivos y que se debe aplicar en caso de que vuelvan a haber problemas.
Los clubes asumieron el compromiso de lidiar con las barras a lo interno y son conocedores de lo que dice la reglamentación. Una persona que incurra en actos violentos puede ser vetada hasta por cuatro años de asistir a cualquier estadio o actividad deportiva organizada.
Por su parte, los equipos que no acaten la ley y no sigan los lineamientos que se piden en seguridad, serán sancionados con la clausura del estadio hasta por cinco jornadas o, incluso, se podría inhabilitar por una temporada completa, dependiendo de los hechos.
Hablamos con Raúl Rivera, subdirector de la Fuerza Pública, quien este jueves se reunió con los 12 clubes de la primera división para darles la pauta a seguir y nos explicó en qué quedaron.
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-Los estadios son recintos privados en la que los equipos pueden decidir a quién reciben o no, por lo que le pueden abrir la puerta a las barras como parte de su autonomía, pero, ¿cuál es la posición de ustedes? ¿Ven problema en que asistan a los estadios?
Hay una situación importante que usted acaba de mencionar, los estadios son recintos deportivos en los que los equipos, mediante la venta de entradas, realizan prácticamente un contrato entre personas y ellos le brindan el espectáculo, es decir, que permiten el ingreso de acuerdo al derecho de admisión.
En este caso, si ellos permiten el ingreso de barras deportivas y se producen hechos de violencia dentro del recinto, obviamente tienen un grado de responsabilidad. La Fuerza Pública tiene una unidad especializada en la detención de barras deportivas con el objeto de ir minimizando las situaciones que pueden ocurrir adentro y afuera de los estadios.
-Usted es una persona que ha estudiado mucho el fenómeno de las barras y se ha especializado en cómo tratar con ellas, ¿para usted lo ideal es mantener a las barras afuera de los estadios o no?
En este caso, lo principal es que las barras deportivas estén autorizadas y sobre todo debidamente identificadas. Algunos clubes lo han estado haciendo con empadronamientos de estas personas con el objetivo de determinar quiénes son y así lidiar mejor con el tema y verificar si, en dado caso, estas personas son partícipes o no de una situación de violencia, para así aplicarles las sanciones.
-Originalmente, el espíritu de la ley era alejar a las barras de los estadios, ahora se permite que ingresen, ¿le parece que hubo alguna contradicción de los equipos con la interpretación de la ley?
Recordemos que esta ley nació producto de un hecho de violencia que se produjo por un enfrentamiento entre barras deportivas (en Cartago). Lo que se pretendía era regular las situaciones de violencia que se pudieran dar, pero nosotros como Fuerza Pública no podemos prohibir el ingreso de las barras a los estadios, por eso los clubes que lo permiten tienen claro que tendrán responsabilidades de cualquier situación que pueda pasar adentro. Nuestra recomendación siempre es regular esa situación.
-¿Siente a los clubes comprometidos para cumplir con lo que se les pide?
Debo decir que sí, tanto los clubes como las seguridades privadas en los estadios están totalmente comprometidos con la seguridad dentro de sus recintos deportivos, este jueves incluso se estableció una comisión que trabajará para la atención de estas situaciones.
-¿Cuáles fueron los principales acuerdos a los que llegaron?
Primero tener claro cuál es la situación que pudiera presentarse producto de la violación de la ley, también hay una situación importante, que es recurrente en cuanto al uso de objetos como la pólvora dentro de los estadios, en el cual tienen claro que está absolutamente prohibida. Lo más importante es que trabajaremos como un equipo ante cualquier duda.
-La ley establece que en un radio de cinco kilómetros afuera de los estadios se pueden aplicar las sanciones, ¿los clubes también serían responsables en estos casos?
Es una responsabilidad personal lo que pase en los cinco kilómetros donde a los individuos se les podría aplicar la ley, sin embargo, si se logra determinar que existe algún tipo de responsabilidad de los clubes serán notificados con el objeto de verificar las situaciones que pudieran presentarse, pero la responsabilidad en esos cinco kilómetros a la redonda es más personal.
-¿Cómo define el tema de las barras en este momento?
Está absolutamente controlado, estamos hablando de que el último acto de violencia grave fue cuando un muchacho salió lesionado en Cartago (2017), de ahí en adelante hemos coordinado con los clubes y realizado operativos en partidos importantes como clásicos y finales, para tener controlado el movimiento de estas personas.
