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Fernando Ocampo, presidente de Liga Deportiva Alajuelense, es la cabeza de un proyecto en la que otros han asumido roles vitales de protagonismo.
Más allá de la satisfacción por tener amarrado un cupo en una posible final en el Apertura 2020, el presi manudo atendió a La Teja y habló largo y tendido sobre el proyecto actual.
En la conversación habló de qué lo tiene contento, qué lo puso a bretear más y si le espantan los fantasmas que le tiran a su equipo para las instancias finales.
¿Cuál es la sensación después de amarrar la posibilidad de jugar una final?
Estamos muy contentos, es el segundo objetivo que nos habíamos planteado, el primero era clasificar, el segundo hacerlo de primeros, estamos claros que falta la parte más importante, viene un mes duro, donde tendremos no solo la fase final del torneo, sino la participación en Concacaf.
El poder terminar en primer lugar nos da un alivio, pero nos compromete muchísimo para lo que viene, que es la parte final. Estamos muy contentos con muchas cosas, como el equilibrio en el plantel, que creo es uno de nuestros puntos altos, así como las dosis de madurez y liderazgo.
Muchos esperan que la Liga resbale en la etapa final por lo que sucedió recientemente, ¿cómo evitar que eso pase?
De las experiencias se aprende, hicimos una evaluación muy crítica al final de los dos torneos, vimos dónde hacer ajustes, se hicieron a todo nivel y la verdad es que estamos satisfechos con lo visto.
Desde que se perdió la final hicimos un análisis de donde había que hacer ajustes, hicimos los cambios a consciencia. La experiencia, que fue muy dura, sirve para enfrentar esas instancias. Nosotros estamos muy convencidos que esta unidad en el equipo será fundamental para esas instancias finales.
¿Qué diferencias ve ahora de esos otros momentos?
Hay una idea más trabajada del profesor (Andrés) Carevic, una compenetración muy importante, una dosis de liderazgo que nos ha venido a aportar muchísimos, figuras como Bryan (Ruiz), (Álvaro) Saborío, Junior (Díaz), el mismo (Adolfo) Machado y se combinó muy bien con una camada de muchachos con un hambre tremenda, que entienden que acá hay una posibilidad de aprender muchísimo al lado de estos jugadores.
Este es un equipo más enfocado en una colectividad, más que en temas individuales, hay una particularidad importante en este torneo, que es la capacidad de revertir el marcador, algo que no veías el año pasado, nos metían un gol y usted decía, ‘ya empezó el sufrimiento’, pues no se veía cómo.
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¿Qué tan importante fue refrescar liderazgos en el equipo?
Yo no te voy a hablar del pasado, pero lo que sí te puedo decir es que hoy la Liga tiene un liderazgo muy marcado, donde se ponen por delante los intereses colectivos y eso hace que usted los vea todos remando en una misma dirección.
Se habla mucho de esta generación de jóvenes, ¿usted qué opina de ellos?
Acá hay dos elementos a tratar, uno, el trabajo que se ha venido haciendo en el CAR, siempre dijimos que había que tener paciencia en este tema, cuando Agustín (Lleida) llegó decían que 80 muchachos salieron y vinieron otros, pero lo que vemos ahora refleja el buen trabajo del CAR y nuestro proceso de liga menor, también cuentan mucho los experimentados que han buscado guiar a estos muchachos.
La mentalidad juega un rol clave, muchos de ellos podrían haber visto como competencia a jugadores de experiencia. A Jurguens Montenegro cuando le dijimos que venía Álvaro Saborío, lo primero que dijo fue, '¡uuuyyy, qué bien!, voy a poder aprender de Sabo’, esa parte de la mentalidad ha ayudado.
¿Qué representa el CAR para la Liga?, ¿es algo que transformó al club?
Sin duda, es el corazón del proyecto de la Liga, del presente y del futuro, es hoy la joya de la corona, la apuesta y el modelo a lo que apostamos los liguistas para desarrollar el talento de liga menor, algo que se había perdido.
No solo en hombres, estamos esperando que termine la pandemia para que también sea un semillero del fútbol femenino, para el próximo año ya tendremos divisiones menores, porque estamos convencidos de lo que el CAR significa, no solo para la institución, sino para el fútbol de Costa Rica.
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Muchos afirman que el CAR es un proyecto que da envidia y lo elogian mucho, ¿qué le dicen a usted?
Muy buenos comentarios, es un orgullo para nosotros, hay pruebas de su éxito, acá hay que darle el crédito a Joseph (Joseph) por su aporte desinteresado a la Liga y a Agustín por su método. Usted ve a un muchacho como Carlos Mora y ve un desarrollo muscular impresionante, ese el fútbol moderno.
Acá ya no se ven muchachos flacos que no aguantaban un trabonazo, usted ve a Mora y a Jurguens cuando meten pata y uno dice ‘pobres los que pegan con ellos’, es un concepto integral, estos son los muchachos que vemos, pero del equipo que está en segunda, hay muchos levantando la mano.
¿Cómo ha sido rol de Joseph Joseph con el equipo?
Joseph es uno de los pilares de la Liga, no solo es nuestro vicepresidente y no solo aporta con el CAR, sino que aporta muchas ideas para el mejoramiento de la Liga en todas las áreas, él a veces prefiere mantener un perfil bajo, pero los que trabajamos en el día a día acá, sabemos que da un aporte invaluable y a todo nivel, tiene una visión clarísima de lo que debe ser la Liga a presente y a futuro.
Si la Liga ganara la 30 en diciembre, ¿cuánto mérito tendría Lleida?
Muchísimo, sería protagonista, acá todos tratamos de que la Liga sea un colectivo, evitamos a todo nivel que la Liga se vea como una pulpería en la que una sola persona toma decisiones. Acá es una cadena, desde la nutricionista, el doctor, pero no cabe duda que el éxito deportivo recae sobre la gerencia, donde Agustín es el comandante y el responsable directo de este éxito.
¿De dónde se agarró para sostener a Carevic en los momentos más complicados?
En el convencimiento del proyecto, hicimos análisis, vimos números, pero acá hay un grupo que apostó por un proyecto y lo hemos tratado de defender de la mayor forma posible, a veces los resultados no se han dado, pero parte de lo que queremos ver en la Liga es mantener un modelo y no estar cambiando al entrenador a cada rato.
Hay que aguantar la crítica y la presión, creo que hemos hecho bien en dar estabilidad en el banquillo, que se analice cuándo se deben hacer y hasta hacer ajustes, pero mantener el modelo.
¿A Geiner Segura se le trajo por eso?
En todas las áreas se hizo un análisis donde podíamos reforzar, vimos las necesidades y se buscaron los recursos, acá también tengo que resaltar la estabilidad financiera que tiene la Liga, en eso no nos dan bola, pero somos el único equipo que presentó estados financieros con resultados positivos este año.
Si hubiéramos estado en quiebra nos sacan en todas las portadas, pero como estamos en números negros nadie nos da pelota, eso ayuda muchísimo también, en época de pandemia se ha hecho un gran esfuerzo para que la institución pelee en la parte deportiva, sin tener problema en la otra, pronto tendremos sorpresas importantes en esta área.
Pese a todos estos esfuerzos, el título aún no llega, ¿es esta la parte más dura para usted?
Sí, a veces cuesta, hay momentos donde nos hemos preguntado ¿qué más podemos hacer? pero no hay mucho tiempo para replantearse eso, eso es la noche después de perder el título, nosotros perdimos el título el 23 de diciembre y el 24 en la noche estaba hablando con Agustín sobre qué íbamos a hacer, no hemos tenido tiempo de lamentos.
Creo que tenemos un presente promisorio, no hemos ganado nada, tenemos una deuda con la afición, pero vamos paso a paso, la meta es ganar cada partido, si usted va así, los resultados llegarán.
