Un exportero costarricense es el presidente de la Federación de Fútbol de Gran Caimán y ha obtenido reconocimientos por su gran labor.
Se trata de Alfredo Withaker, quien jugó en Costa Rica con Saprissa, Limón, Pérez Zeledón y Uruguay de Coronado.
Este lunes, en el Día del Negro, resaltamos la labor de este costarricense en la isla caribeña.
Don Alfredo, de 54 años, nos atendió vía Whatsapp desde su oficina en George Town, capital del país.
-¿Cómo llegó a la isla?
Mi papá (Alfredo Withaker) era oriundo de aquí, tengo más de 27 años acá. Vine a jugar un torneo con el Vida de la Ceiba (Honduras) y el presidente de la Federación en ese entonces me invitó a venir a observar y ser parte de una copa caribeña. Luego, el presidente del Banco Central me hizo una oferta de trabajo, me gustó y me quedé y jugué con el equipo del banco.
-Pero, ¿cómo llegó a la Federación?
Me retiré del fútbol y fui a arbitrar partidos escolares de U17. Vinieron visores de Jamaica y como había sido jugador se me facilitó mucho arbitrar. Me metí de lleno, fui árbitro FIFA diez años y una vez siendo árbitro FIFA tuve vínculos con la Federación y monté una estructura de réferis que aún se mantiene.
-¿Cómo le dieron la presidencia?
Seguí vinculado y en administraciones pasadas se me dio la oportunidad de trabajar como jefe del departamento de árbitros de la Concacaf, durante casi tres años, pero en ese tiempo la Federación estuvo hundida, desaparecida, sin proyecto alguno, hasta que un grupo de equipos se unieron en un proyecto para levantar la Federación y me preguntaron si estaba interesado en tomar la dirigencia.
- ¿Lo tomó de inmediato?
Al principio lo dudé, se perdieron patrocinios y la Federación estaba sin pies ni cabeza, hundida en deudas enormes y, sin embargo, le puse el pecho a las balas.
- ¿Cómo le ha ido?
En dos años y medio, muy bien. Lo primero fue formar una estructura, tener proyectos y voluntarios que quieran el fútbol. Tuve asesoramiento, de Leroy Lewis, de Jorge Alarcón, que me dieron guía.
- ¿Qué ha logrado hacer?
Cosas que en un equipo del Caribe, incluso de Concacaf, es difícil que se hagan. Es fácil ver que la plata está invertida, no en edificios de 30 millones de dólares, sino en el fútbol.
- ¿Cómo es eso?
Cuando le hablo de proyectos hablamos selecciones nacionales. La sub-20 está clasificada entre los primeros diez a nivel Concacaf, la sub-17 ganó el grupo en fase de clasificación y está esperando al ganador de un grupo para jugar un partido. Esta selección tiene dos años de no perder un partido y jugando torneos.
Tenemos una sub-15 que es la ganadora a nivel de torneo de la Copa del Caribe, que no ha perdido. La mayor, que es una sub-22 escaló 11 lugares en el ránking FIFA, luego de casi nueve años y medio ganó un partido de clase A de local y de visitante. En primera ronda terminó primero junto a Barbados, que nos ganó por gol diferencia.
-¿Qué significa invertir en fútbol si no es en infraestructura?
Invertimos en técnicos a tiempo completo, tenemos uno inglés, uno portugués, cubanos. Todos los entrenadores de Islas Caimán se capacitan internacionalmente para conseguir licencia de la Concacaf. La liga menor está bien organizada, tenemos a todas las selecciones desde 13 años activas.
- ¿Cómo está la infraestructura?
El Centro de Excelencia que tenemos tiene cancha clase A y en tres meses tendrá iluminación para juegos internacionales, en dos meses construiremos los camerinos, comedor y antes de que termine el año queremos tener una segunda cancha. Terminará siendo un estadio pequeño, como para 3.500 personas.
- ¿Hay campeonato?
Claro, este año en vez del clásico torneo todos contra todos, gracias a la administración nueva se jugará un campeonato de primera y otro de segunda con diez y diez en cada categoría. También tendremos un torneo femenino con seis equipos.
- ¿Qué tal el talento en la isla?
En el Caribe hay mucho talento, es el vivo ejemplo de Limón, donde hay una gran cantidad de buenos jugadores, pero no hay nadie que se atreva a preparar algo concreto y a invertir y dar tiempo a ver qué pasa.
- ¿Ha venido a Costa Rica?
- Tengo como año y medio de no ir. Voy directo a San Francisco de dos Ríos donde mi mamá vivía hace diez años, o sino a Tibás donde mi hermana Shirley, que me crió y luego a buscar a la familia a Pérez Zeledón y a Limón.
-¿Cómo es Gran Caimán?
- Es tan bonito, como Costa Rica hace 40 años, con buenas personas, gente educada, que quiere al prójimo, sin maldad, que ama la naturaleza, que dice buenos días, buenas tardes, que Dios te acompañe...
- Turísticamente, ¿es un lugar con infraestructura o es más rural?
-Casi igual que Costa Rica hace 40 años. Las playas son públicas, nadie es dueño de nada, usted entra cuando le da la gana, arena blanca, mar azul, no tiene que estar pendiente que alguien robe. Siete millas es la playa más famosa.