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¿Recuerda a Alejandro Aguilar? Si su respuesta es no, aquí le refrescamos la memoria.
Él fue delantero de Liga Deportiva Alajuelense, Carmelita y Cartago, equipos en los que anotó 27 goles en la máxima categoría entre el 2011 y hasta el 2016, cuando emigró al fútbol de Estados Unidos.
Su mejor momento fue en el Verano 2013, cuando terminó el campeonato como sublíder de goleo con 10 anotaciones, jugando con el cuadro verdolaga. Eso le valió para ser convocado por Jorge Luis Pinto a la Sele, incluso jugó un partido amistoso ante Canadá, el cual la Tricolor ganó 1-0.
Aguilar, quien fue campeón nacional en cuatro oportunidades con la Liga de Óscar Ramírez, es parte del FC Arizona de la Liga Nacional Premier de Soccer (NPSL por sus siglas en inglés), que viene siendo la tercera categoría en el sistema de competición gringo.
Sin embargo, al futbolista, de 29 años y oriundo de Alajuela centro, su equipo le suspendió temporalmente el contrato por culpa del coronavirus.
Afortunadamente, esto no lo ha perjudicado tanto ya que en el 2018 creó junto a su esposa, Jennifer Bejarano, una empresa de limpieza en la que no paran de trabajar, pues les abundan los contratos para desinfectar lugares debido al contagioso virus.
- ¿Cómo le ha ido en Estados Unidos con el coronavirus?
El contrato que tengo con el FC Arizona se suspendió por la emergencia, al igual que la liga, lo que sabemos es que si todo se normaliza podremos jugar hasta junio o julio del 2021.
- ¿Entonces cómo está haciendo?
Gracias a Dios en el 2018, junto con mi esposa, creamos una empresa que se llama “Elite 90 Clean Service”, con la que limpiamos casas, edificios y oficinas, si no tuviéramos esto, mi situación sería muy difícil.
- ¿Le ha tocado ir a limpiar casas estos días?
Claro, lo hago con mi esposa, tenemos clientes muy grandes y otros que son pequeños, entonces también empleamos a gente para que nos ayude.
- ¿A cuánta gente le da trabajo?
En total somos seis, entonces le damos trabajo a cuatro personas más. Cuando vamos a hacer una limpieza siempre vamos en parejas porque el trabajo, dependiendo de cómo esté lugar, puede ser más difícil de lo normal.
| Para entrenador |
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| En Costa Rica, Alejandro sacó la licencia E para dirigir y en Estados Unidos está estudiando para sacar la D. El jugador tiene dos hijos, Matías de 10 años y Benjamín de 6. |
- ¿Trabaja todos los días?
Solo de lunes a viernes, empezamos a las 8 o 9 de la mañana y terminamos como a las 3 de la tarde, cada limpieza la hacemos con equipos especiales y por dicha en este momento tenemos agenda llena.
- ¿Con el coronavirus les ha ido bien?
Al principio no porque la gente estaba muy asustada, pero hace como mes y medio la cosa volvió a levantar y ahora tenemos cerca de 15 contratos semanales por pareja.
- ¿Les ha pasado algo raro en alguna de esas limpiezas?
Una vez mi esposa estaba limpiando un ventilador y rompió dos aspas, nosotros estábamos muy asustados y acongojados porque era un cliente nuevo. Me tocó limpiar un clóset y el dueño de la casa tenía guardadas unas armas, yo me asusté mucho porque pensé que nos iba a hacer algo cuando le dijéramos lo del ventilador, al final por dicha el señor comprendió que fue un accidente y por dicha no pasó nada (risas).
- Estados Unidos es el país con más contagios y muertes, ¿ustedes cómo se protegen?
Antes de hacer una limpieza le decimos a la persona que nos contrata que nos informe si tiene algún padecimiento para posponer la cita. Nosotros tomamos todas las precauciones, usamos guantes, mascarillas, trajes y protectores para los zapatos. Además, los líquidos que usamos para desinfectar son bastante buenos y también contamos con maquinaria para hacer una buena desinfección.
- ¿Por qué les nació la idea de crear esta empresa?
Queríamos un ingreso adicional, con el fútbol no me va mal, pero gracias a Dios se nos presentó la oportunidad por unos contactos de mi esposa y así fue que empezamos.
- Cambiando de tema, ¿cómo es que llegó a Estados Unidos?
En el Verano 2016 yo ayudé a que Carmelita no descendiera, en ese momento estaba a préstamo porque le pertenecía a Liga y yo quería volver al equipo. Me dijeron que no se podía porque ya estaban llenos, eso a mí me dolió. Don Raúl Pinto me ayudó a finiquitar el contrato como en junio de ese año y en julio me vine a jugar aquí para un equipo que se llama Pittsburgh Riverhounds, ahí estuve un año y desde el 2017 juego para el Arizona FC.
- ¿Se fue enojado de la Liga?
No, pero sí me hubiera gustado que me dieran más oportunidad.
- ¿Descarta jugar en Costa Rica otra vez?
Aquí tengo una vida con mi esposa y mis hijos, Matías y Benjamín. Antes de venirme, Jafet Soto me dijo que si no hubiera tenido contrato con la Liga, me contrataba. En este momento lo veo difícil, pero no lo descarto.
- Por último, ¿qué le hace falta a la Liga para romper la maldición de la 30?
No lo veo como maldición, es una sequía como han tenido los equipos grandes. El equipo está cerca de la 30 y, si no me equivoco, este año la Liga la va a lograr.
