Eva Hidalgo, portera de Suva Sports, lloró en silencio el miércoles pasado, luego de recibir diez goles del Sporting en la primera división del fútbol femenino.
La guardameta le confesó a La Teja que fue una noche larga, pero que los tragos amargos se deben sobrellevar y ya está lista, junto con sus compañeras, para lavarse la cara.
Su equipo tendrá un compromiso muy duro este sábado a las 4 p. m., cuando visite la Cueva del Monstruo para enfrentar a Saprissa.
-¿Cómo tomó esa dolorosa derrota?
Es muy frustrante. Uno se agüeva en el momento, pero hay que sobrellevarlo. Ahora queremos hacer un buen papel ante Saprissa.
- ¿Cuál había sido la máxima cantidad de goles que había recibido en un partido?
Cinco contra Alajuelense, este mismo torneo.
-¿Cree que en alguno de los goles pudo haber hecho un poco más?
Estoy consciente que en dos o tres goles pude aportar más, pero las cosas no se dieron por una u otra situación.
-¿Cómo fue ese miércoles, luego del partido?
El miércoles cuando llegué, estaba superagüevada, volví a ver el partido, lo repasé, como vivo cerca del estadio, en la casa club, todas las chiquillas estábamos igual. ‘¿Cómo es posible que nos pase esto?’. Estamos claras que algunas actitudes fueron las que nos llevaron a eso.
-¿Lloró?
La verdad, sí lloré porque uno se agüeva. De la misma frustración y coraje que traía. Soy muy reservada con mis cosas, lo hice sola.
-La familia, ¿qué le dijo?
Claro, también, mi mamá me llamó, mi papá me apoya demasiado, de una u otra manera aportan y lo alientan a salir adelante, a dar lo máximo. Me alentaron, dijeron que di lo mejor de mí.
- Hay que ser valiente para conversar de esto...
No ha sido fácil llegar donde estoy, sé a lo que me enfrento, no estamos siendo un equipo fuerte, pero si cada compañera da lo mejor de sí, podemos salir adelante. Aún hay posibilidades de estar arriba.
-¿Qué les pasa?, ¿no están unidas?, ¿o hay problemas internos?
El equipo está unido, problemas internos no hay. Yo no me explico qué nos pasó. Mañana ante Saprissa es para limpiarnos la cara y salir del sótano.
-¿Qué pensó cuando el árbitro les pitó un penal al minuto 90?
Mucha frustración, fue una manota, pero el árbitro estaba largo.
- Saprissa será muy difícil...
Claro, ellas van a morir en la cancha, necesitan los puntos, agarraron confianza con Pérez Zeledón. Estoy consciente que será bastante difícil, pero tenemos que ir a meter (ganas). Los diez goles ya quedaron atrás, ya pasó, es momento de levantarnos.