El portero del Deportivo Saprissa, Kevin Chamorro, se convirtió en la gran figura del clásico de clásicos del fútbol costarricense que enfrentó a morados y con la Liga Deportiva Alajuelense este domingo 2 de abril.
Seríamos injustos al decir que Chamorro fue figura porque le atajó un penal, a los 62 minutos del partido, al manudo Giancarlo “Pipo” González. Injustos porque ya, incluso sin ese penal, Kevin se había ganado lo de figura por cómo estaba defendiendo los tres tubos saprissistas.
El hijo de Sardinal de Carrillo, comenzó el partido bien concentrado, en las primeras de tanteo sacó una chilena con sello de gol de Johan Venegas.
A los 32 minutos desvió a tiro de esquina un cabezazo del Cachecón que iba con verdadero veneno.
A los 43 minutos, en un cara a cara con Josimar Alcócer, le ganó el duelo y salvó a su equipo de un gol que le habría cambiado totalmente la historia al partido porque hasta ese momento iban 0-0. Por supuesto, no puede quedar por fuera del análisis el minuto 62, al taparle el penal a Pipo.
“Salimos con la consigna de ganar los tres puntos. Sabíamos que era un partido de 6 puntos en una cancha complicada. Gracias y honra a Dios que nos da la victoria hoy”, comentó el exjugador de Carmelita y San Carlos al finalizar el clásico.
“Todo lo pongo en manos de Dios, que es el único que me respalda en las buenas y las malas, el apoyo de mi familia, de mi hijo (Thiago) que vino a mi vida a darme un motivo por el cual esforzarme más. Entreno día a día para aportar mi granito de arena al equipo y gracias a Dios se me está dando”, explica el portero como los pilares que le ayudan a su crecimiento de las dos últimas temporadas.
A pesar del bueno momento actual que vive con el campeón nacional, quiera mejorar.
“El torneo pasado también me fue bien y ahorita trato de ir mejorando día con día y si el campeonato pasado fue bueno, este tengo que hacerlo mejor”, aseguró Chamorro.