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Pablo Arboine, jugador del Deportivo Saprissa, vivió un día único el 27 de diciembre pasado, cuando unió su vida en matrimonio con su ahora esposa, Carolina Estribí.
Caro, quien tiene 8 años de relación con el defensor limonense, conversó con La Teja y nos contó detalles de este día tan especial, en el que tuvieron la compañía de jugadores como David Guzmán, Fidel Escobar, Jefry Valverde y los ahora exmorados Youstin Salas y Rachid Chirino.
La pareja no esperó mucho para irse a vivir junta y cinco meses después de comenzar su relación formaron su nidito de amor y fue en marzo del año pasado cuando el futbolista le entregó un anillo de compromiso, desde ahí trabajaron en los preparativos para el enlace.
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“El tema del matrimonio lo habíamos conversado desde hace tiempo, pero siento que todo llegó en el momento perfecto y, gracias a Dios, no apresuramos las cosas y todo se dio en el tiempo justo.
“Después de que nació nuestra hija, Esmay, hace dos años y medio, la relación cambió para bien, nos sentíamos más estables emocionalmente y todo ha sido como muy relajado, ya tenemos demasiado años conviviendo juntos y nos hemos unido mucho, vimos que la boda sería como la cereza en el pastel”, relató.
El día más importante
La boda se realizó en el hotel Radisson, en el centro de San José, y comenzó a eso de las 4 de la tarde. Para lograrlo, la pareja contrató a un planificador, quien les ayudó con cada uno de los detalles.
“Nosotros entendemos la dinámica de trabajo de Pablo y buscamos una fecha que no afectara su trabajo, en donde no se presionara por las fechas de las finales del torneo y, de igual manera, teníamos un plan B porque supimos del atraso del campeonato, por la emergencia nacional y todo salió de acuerdo a lo que planificamos.
“Pablo fue quien escogió la decoración, que fue en tonos negros con dorado y flores blancas. A veces soy muy indecisa, pero Pablo agarró una vajilla, vio los colores de los manteles y supo hacer una mezcla muy elegante, que combinara a la perfección y nos gustó cómo quedó todo”, relató.
Carolina dijo que la boda fue civil y uno de sus hermanos, quien es pastor, les dio la bendición y les dedicó unas palabras muy lindas.
“Invitamos a unas 100 personas, entre familia y amigos y no quisimos contar nada hasta el propio día de la boda, porque en redes sociales la gente a veces no se mide con los comentarios y la verdad no queríamos ver comentarios negativos en ese día tan especial.
“Al final del campeonato estábamos agüevados, porque no se logró el pentacampeonato, pero ahora Pablo está enfocado en el torneo que viene y esos días, en los que no estuvo jugando, pudimos terminar de trabajar en detalles para la boda”, añadió.
La esposa del defensor saprissista recordó que no se complicó con la elección de su vestido de novia, pues el planificador la llevó a una tienda y se enamoró del primero que se probó. Su traje de novia era blanco, el de Pablo blanco marfil y la bebita llevó un vestido en color blanco, al igual que su mamá.
Alora, la pareja está esperando que Arboine tenga unos días libres para irse de luna de miel.
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“Estamos espreando tener vacaciones para irnos de paseo. Pasamos Año Nuevo en Siquirres, en la casa de la familia de Pablo y nos devolvimos el primero de enero a nuestra casa, en Heredia, porque el equipo comenzó los entrenamientos el 2 de enero.
“Sabemos que Pablo no sumó muchos minutos el campeonato pasado, pero es una persona sumamente fuerte, obviamente nos ha afectado el hecho de que no ha jugado, pero también estuvo lesionado y gracias a Dios ya se recuperó.
“Ahorita está entrenando muchísimo y ahí estamos esperando el inicio del torneo, no para de trabajar y nosotros lo apoyamos mucho. Además, cuenta con personas que se preocupan por él, que están pendientes de cada movimiento que hace y son las personas que valen la pena, porque a veces hay gente que ve todo desde afuera y no sabe lo que se vive”, añadió.
