Puntarenas no solo juega bien, sino que cree en sí mismo. La clave está en Edwin Lugo, coach deportivo que llegó este torneo para fortalecer la mentalidad del equipo y potenciar su rendimiento.
Lugo llegó este torneo al cuadro naranja para levantar el ánimo de los jugadores y trabajarles la parte mental y los resultados están a la vista. El Puerto es el líder y ha dejado de pensar en la lucha por el no descenso. Ahora quieren clasificar.
El torneo pasado, terminó último con un fútbol que daba pena. El crecimiento futbolístico va de la mano con la motivación que ha logrado imprimir Lugo.
No obstante, reconoce que ese “brete mental” ya lo traía el equipo con el actual cuerpo técnico y que él llegó a reforzarlo.
“Hay un montón de factores que han convergido, pero lo más notable es el compromiso de los chicos que están convencidos de que, para trascender hay que darlo todo, siempre”, dijo.
Lugo se encontró con un equipo con muchos jugadores de la zona, que sienten la camiseta, nacieron y crecieron en el Puerto. Eso mantiene la llama viva.
“Ellos saben lo que se están jugando, en doce días está la final de Copa, lo tienen claro, pero también están con el descenso y ahora arriba, son varios campeonatos que están jugando y van en una curva ascendente”, manifestó.
Esa curva no solo es mental, es física y deportiva, todas deben ir de la mano para que el equipo logre mantenerse.
Para ello, Lugo indicó que al menos deben tener una charla colectiva una vez a la semana, más aquellos enfoques específicos, que requieren los jugadores de forma individual.
Lugo dice que un aspecto básico para que el equipo logre mantener el camino, es no dejarse apantallar por el primer lugar, ni dar paso a la arrogancia.
“La base del coaching es la humildad, hay que entender que si gano no soy el mejor, si pierdo no soy el peor, si empato no es que jugué mal”.
Explicó que en el partido del domingo ante Guanacasteca, que igualaron a dos goles, hubo distracciones que terminaron en gol. El Puerto necesitaba, al menos el empate en el Lito Pérez para asumir el liderato, tras la derrota de Herediano ante Alajuelense, pero el juego estuvo cuesta arriba dos veces.
“Es parte del fútbol, puede pasar. El equipo se mantuvo hacia adelante hasta que llegó el empate. Hasta pudimos ganar. La esencia es la humildad para poder llegar a buen puerto”, añadió.