El fútbol de la primera división es una hoguera que come técnicos con una rapidez impresionante. En 19 fechas del Apertura 2021 ocho clubes cambiaron de entrenador. Alajuelense (dos veces), Pérez Zeledón, Guanacasteca, Herediano, San Carlos, Jicaral, Guadalupe y por último Saprissa hicieron movimientos.
Por eso llama tanto la atención el caso de Johnny Cháves, entrenador del Municipal Grecia, quien nos reveló que desde que es entrenador en el 2005, lo más que ha estado sin trabajo fueron seis meses en el 2013.
Capacitarse constantemente, no irse con la primera oferta que le tiran y saber leer los momentos de los equipos lo ha ayudado para que el trabajito nunca le falte.
“Yo adonde he estado por dicha he hecho trabajos muy largos, en Pérez Zeledón estuve cinco años como asistente y dos años y medio como entrenador. Me fui a la UCR y estuve dos años y medio, luego dos años en Cartago, después estuve un torneo en San Carlos y cinco años en Guápiles”
“Eso me ha permitido que la gente me vea como alguien estable, que vea el resultado y me busque, por dicha rápidamente siempre he podido encontrar trabajo. Proyectar a equipos de bajo presupuesto a pelear y sacar jóvenes, eso me ha ayudado a mantenerme estable en nuestro campeonato”, dijo.
¿Desde el invierno del 2005 cuando debutó en los banquillos con Pérez Zeledón hasta hoy, de cuánto es el periodo de tiempo más largo que ha estado sin trabajo?
Fue cuando salí de San Carlos, el equipo desciende en el 2013, termino en abril y hasta en noviembre me salió algo en Guatemala, recuerdo que llegué un Día de los Muertos. Ese ha sido el periodo más largo que viví, seis meses es lo más que he estado sin trabajo.
¿Desde entonces siempre ha estado en un equipo?
Sí, me vine y me contrataron en Barrio México, me salió una oferta para dirigir a Belén pero me quedé en el proyecto de Barrio México y luego me fui para el Santos por casi cinco años.
En los últimos siete años siempre he estado con alguien, ahora que salí de Pérez (el torneo pasado) duré un mes afuera y tomé el proyecto de Grecia en el que ya voy por el segundo torneo.
¿Por qué su caso es tan poco común en el fútbol nacional?
Yo siempre me estoy actualizando y me capacito mucho, me mantengo al día con las tendencias del fútbol y saber entonces cómo uno puede jugar en cada equipo, eso creo que me ha hecho muy regular en los equipos para tomar proyectos largos.
Saber qué hacer con equipos de bajo presupuesto y darles proyección tanto a ellos como a los jóvenes, además de mi compromiso y profesionalismo. A muchos también les agrada mi forma de ser y me ha permitido poder mantenerme ahí.
¿Saber leer los momentos de las ofertas también es importante?
Sí, claro, yo tuve en el 2008 y en el 2017 la oportunidad de trabajar con Alajuelense y estaban pasando momentos difíciles como usted dice y no me fui. En ese momento fue cuando la Liga sacó a una generación de jugadores experimentados, hizo una renovación y fue cuando llegó el (Marcelo) “Popeye” Herrera.
Igual en el 2017, es cuando están buscando un campeonato (la 30), yo les dije que sí en ese momento, pero no me fui porque no se pagó la cláusula con Santos y no presioné. Era un buen momento para llegar porque había que renovar y crear una buena simbiosis entre jugadores nuevos y los experimentados.
Son situaciones en las que usted no se puede precipitar, hay que darse cuenta si es el momento justo, si usted está preparado para dar el salto a uno de estos equipos. No es un paso fácil.
Salir corriendo detrás de un equipo grande cuando llega una oferta y dejar un proyecto estable le ha costado caro a muchos técnicos, ¿eso se analiza poco a veces?
Usted tiene que analizar muy bien adónde va a llegar y con quién va a trabajar. Preguntarse si la visión que tiene esa gente calza con la mía, si sus valores son los míos, si puede encontrar esos aspectos, generalmente permite hacer un buen equipo de trabajo entre junta directiva y entrenador, que su visión va a calzar y que se siente bien con los valores de ellos. No es solo ver lo deportivo y lo económico, hay que ver todo eso para ver si te podés sostener.
¿Hay equipos del fútbol nacional a los que usted les ha dicho que no?
Sí, han habido un par de casos y por eso mismo, porque sentía que no era el momento o era un lugar donde sentía que no podía montar un buen proyecto. También me han llegado en momentos donde tengo trabajo. Yo me comprometo mucho y trato de terminar mis proyectos.
¿La posibilidad de dirigir a Saprissa, Herediano o Alajuelense es un pendiente en su carrera?
Sí, claro, es algo diferente, son equipos que tienen mucha historia, jugadores de gran nivel en donde usted tiene que tener el liderazgo para manejarlos, es un gran desafío poder manejar un proyecto así, con las exigencias que tiene la prensa y los aficionados. Es un gran desafío que me gustaría vivir.
¿De Herediano y Saprissa lo han buscado alguna vez?
Sí, me han dicho que he estado en una terna, en Heredia estuve un par de veces en una terna pero hasta ahí, en Saprissa en algún momento valoraron mi condición, pero formalmente no se me acercaron.