Costa Rica cayó 2-0 ante Brasil y quedó eliminada del Mundial, pero podrá decir que entró a los libros de historia del fútbol por una jugada que se dio en esta mejenga.
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Cuando el partido estaba cero a cero y el cronómetro marcaba el minuto 77, Neymar fingió una falta de penal recibida, según él, porque el defensa Giancarlo González lo tiró al suelo.
De entrada, el árbitro holandés Bjorn Kuipers se fue en todas y la señaló, sin embargo, vinieron las quejas de los jugadores ticos y el central empezó a hablar por su auricular: al final decidió acercarse a uno de los monitores a un lado de la cancha.
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Ahí, en una pantalla comprobó que lo que hubo fue teatro de Neymar y cambió la decisión, siendo la primera vez en un Mundial que la tecnología anula un penal.
Antes del juego entre ticos y brasileños, se habían señalado 11 penas máximas, cinco de ellas con ayuda del VAR o videoarbitraje que entró a jugar por primera vez en Rusia 2018.