EscucharAlajuelense cumplió su cometido de revivir la cuadrangular al sacar una victoria clave ante el Herediano, que abrió nuevamente las opciones para todos.
En Tibás cruzaban los dedos porque su archirrival saliera bien parado ante el Team y evitar que el equipo florense se fuera en fuga casi de manera inevitable hacia el título.
La Liga retomó el camino de la mano de Luis Diego Arnáez, que estuvo lejos de jugarse un partidazo, pero al menos recupera un poco su maltratada confianza.
Esta vez no hubo decisiones ni cambios raros en medio partido de parte del banquillo. Tampoco rojas que lo complicaran todo.
Los manudos fueron a lo seguro con sus hombres más veteranos. “El Flaco” sabe muy bien quién es quién en Alajuela, por lo que solo hubo que hacer un recambio de posiciones.
Pemberton volvió a tocar bola, igual que Salvatierra, mientras que otros como José Luis Cordero se quedaron en banca.
Pegó rápido.
Muy pronto se adelantó el León, a los 12 minutos por un penal bastante riguroso que Ricardo Montero señaló sin dudar.
La manera como Rándall Azofeifa desplazó a Daniel Villegas tal vez muchos árbitros no la pitan, pero el mundialista Montero sí.
Desde el banco, Jafet Soto estaba que se arrancaba el pelo y gritaba casualmente de manera irónica “¿y ese es el árbitro mundialista, ese es el árbitro mundialista?”.
El asunto es que por más reclamos, Róger Rojas no falló desde los 11 pasos para adelantar a la Liga.
Ro-Ro es el infaltable, el hombre de tres pulmones que siempre saca la cara por su equipo, por eso posiblemente es que dolió tanto la amarilla que le sacaron a los 41 minutos, la que le hará perderse la revancha del domingo ante el Team.
Será Jonathan McDonald quien deberá hacer las del llanero solitario en el ataque erizo, cuando regrese de la sanción de dos juegos por su expulsión en el clásico.
Estaba para los dos.
La mejenga fue pareja con opciones para los dos equipos, aunque en esta ocasión a los florenses les faltó ese extra que siempre aparece en otras mejengas.
La ganas de Arrieta no alcanzaron, el oportunismo de Yendrick no llegó, la táctica fija de Azofeifa estuvo lejos de la precisión, les faltó ese algo que siempre les salva.
El domingo se viene una verdadera final, si la Liga gana pasará al Herediano, si los rojiamarillos ganan matan al León, pero en este momento nada está dicho. Se puso bonito esto.
