El excapitán de la selección de Uruguay Diego Lugano confesó que una de las cosas que más lo marcó en su carrera como jugador fueron los repechajes mundialistas que enfrentó la Celeste.
El exdefensor charrúa jugó en la repesca contra la Sele camino al mundial a Sudáfrica 2010 y anotó en la primera mejenga jugada el 14 de noviembre del 2009, en el estadio Ricardo Saprissa. Al final los sudamericanos ganaron el pulso y fueron al mundial. (1-0 en Costa Rica y 1-1 en Uruguay)
Sobre esta y otras experiencias conversó el sudamericano este miércoles, durante su participación en Concacaf Access, una conferencia para abordar temas de actualidad futbolística, torneos internacionales y lo que se viene para la selección costarricense de cara al mundial.
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Además de Lugano, en el evento, realizado en el hotel Real Intercontinental, estuvo el periodista y narrador deportivo salvadoreño Fernando Palomo, la periodista hondureña Carmen Boquín, el secretario general de Concacaf, Philippe Moggio y Rodolfo Villalobos, presidente de la Fedefútbol.
“Volver acá luego de 12 años tiene un sabor especial, obviamente es una ciudad y un país del que guardo un lindo recuerdo, no solo por el tema deportivo. También guardo un gran respeto por lo que hacen a nivel deportivo, es un placer volver a hablar de fútbol, a conocer un poquito más, en mi vida como exjugador, a aprender del fútbol de Centroamérica, conocer cómo se prepara Costa Rica para el repechaje, cómo funciona.
“Son cosas que a uno siempre lo alimentan, lo mejoran a uno como persona, somos amantes del fútbol, cambiar experiencia, desde mi punto de vista, jugué tres repechajes, soy uno de los jugadores que tiene más experiencia en esto. En la vida se gana, se empata o se pierde, como en el fútbol, expresó Lugano, de 41 años.
El uruguayo destacó que al igual que la selección charrúa, en Costa Rica el repechaje llegó como una oportunidad y no como un castigo.
“Los equipos llegaron desde abajo y subieron al repechaje. Muchos creen que para Costa Rica y Uruguay el repechaje es un castigo, porque deben clasificar directo, pero surge como una oportunidad, luego de una eliminatoria dramática”, expresó.
- ¿Cómo visualiza el repechaje entre Costa Rica y Nueva Zelanda?
Estos juegos toman un tinte medio dramático, con una carga emocional, de tensión muy grande, no hay margen de error, son noventa minutos en los que no se pueden equivocar en nada, donde todo puede pasar y el castigo es muy grande y el premio es estar en la Copa del Mundo.
Jugué tres repechajes, dos finales de la Copa Libertadores, una semifinal de la Copa del Mundo, partidos grandes; pero nunca sufrí tanta tensión como antes de un repechaje. Es una final en donde está el purgatorio o el infierno, hay todo para perder y solamente la obligación en el caso de que se gane.
Nueva Zelanda tiene experiencia contra Perú fue superior (repechaje hacia Rusia 2018). Costa Rica tiene a favor la experiencia, el calor, jugando en Catar un solo partido. Preparen los corazones para 90 minutos.
Ojalá Costa Rica pueda rectificar, tiene condiciones muy grandes, son noventa minutos en donde puede pasar cualquier cosa, no se puede dejar nada al azar y será un partido casi perfecto desde todo punto de vista.
“Cuando termina (el repechaje) es un alivio, no podés ni festejarlo, me sentía aliviado, esa es mi experiencia”.
— Diego Lugano, exjugador de Uruguay.
- ¿ Quién se lleva el pase al Mundial?
Creo y deseo que sea Costa Rica, obviamente, por mi experiencia en el fútbol no se puede subestimar nada y hay que tomarlo como es, como una final, en donde el rival también tiene su experiencia, ha evolucionado y ve en este repechaje una gran oportunidad.
- ¿Qué recuerda del primer partido de repechaje contra Costa Rica (noviembre 2009)?
Veníamos de una eliminatoria muy cargada, muy tensa, habíamos quedado fuera del mundial anterior, de Alemania (2006) y teníamos la obligación histórica, la presión inmensa de ir a Sudáfrica, fueron dos partidos que desde lo emocional fueron muy tensos, en Montevideo también fue así.
A partir de esa victoria en el repechaje contra Costa Rica, el equipo se liberó, se hizo un gran mundial llegamos a las semifinales de Sudáfrica y al año siguiente fuimos campeones en la Copa América, volvimos a Brasil y hay recuerdos muy lindos de San José.
- Hablemos de la rivalidad con Costa Rica en el Mundial de Brasil 2014.
La rivalidad, en el buen sentido de la palabra, porque Costa Rica es importante para mí, porque en el Mundial de Brasil jugué mi último partido con la selección de Uruguay, después de 96 partidos consecutivos.
Ese día, cuando perdimos contra Costa Rica, me lesioné la rodilla izquierda, perdiendo un partido que íbamos ganando 1-0 en el segundo tiempo, que perdimos ante una Costa Rica que hizo un buen fútbol y que haría un mundial fantástico. Tengo ese recuerdo agridulce.