La policía argentina arrestó a un árbitro de fútbol de la primera división de ese país implicado en una red de prostitución infantil con jugadores de un equipo juvenil.
Martín Bustos fue detenido el sábado en la localidad de Tigre, al norte de Buenos Aires, según informó la policía.
El equipo Independiente, de la primera división argentina, presentó una denuncia a principios de semana después de que uno de sus jugadores, que sufrió abuso sexual, rompió en llanto durante una sesión con un psicólogo.
El jugador narró presuntos abusos y haber tenido relaciones sexuales con hombres a cambio de dinero.
Además, dijo que otro miembro del equipo reclutaba a los jugadores para la red de prostitución.
El central, quien sería indagado este lunes, se encontraba en una vivienda en la localidad de Pacheco.
Hasta allí arribaron los hombres de la policía, tras montar un operativo en siete manzanas a la redonda, ya que según fuentes policiales el sospechoso había engañado a la fiscal sobre la dirección exacta en la que se iba a entregar.
Las víctimas serían cuatro futbolistas de la sexta y séptima división del club, mientras que se investiga a un jugador de la cuarta por operar desde una pensión.
La charla en la que el árbitro habría acordado su captura tenía una condición: que no hubiera exposición mediática. La Policía llevó a Bustos rumbo a los tribunales de Avellaneda para iniciar su proceso ante la ley.