El 9 de abril, cuando al Clausura 2024 aún le quedarán algunas fechas de la primera fase, Rafael Núñez, capitán y defensor del Municipal Liberia cumplirá los 40 años.
Para ese momento, Rafa estará igualando al volante de Alajuelense, Michael Barrantes, como los futbolistas con mayor edad en el campeonato nacional. Ambas figuras demuestran que rendir, ser competitivos y estar en grandes condiciones físicas no tiene nada que ver con la edad.
Lo del capitán pampero está a simple vista, en la pretemporada que realiza con los Coyotes quedó a demostrado que está con toda la leche, con un cuerpo que desearía más de un carajillo.
Rafa es el defensor de más edad del torneo, por su carrera ha pasado por diversos equipos, Puntarenas FC, Carmelita, Jicaral, Liberia, entre otros. Formó parte del histórico equipo chuchequero que ganó la Copa Uncaf del 2005.
“El torneo pasado me comentaron el dato, me dijeron que podía llegar a una lista bastante reducida que con 40 años han jugado en primera división y lo tomo como un lindo reto de prepararme bien, de saber que el trabajo diario es muy importante para mantenerme bien en lo personal.
“Me llena de motivación el llegar a jugar, profesionalmente, a los 40 y no es solo jugar, sino con la fe de ser competitivo y apoyar al equipo, que al final de todo es lo más importante”, destacó.
En lo que parecía el último soplo de su carrera, levantó otro trofeo, esta vez el campeonato de Liga de Ascenso con los aurinegros cuando en junio se ganó el ascenso para volver a la máxima categoría.
En Liberia se siente aún con la pasión por seguir jugando e inspirar a sus compañeros a que si se es ordenado, disciplinado y se respeta a la profesión, el fútbol puede dar para largo.
“Sin duda el estilo de vida que uno tenga es la clave, el profesionalismo, en mi caso. Gracias a Dios, no tengo ningún tipo de vicio y, por lo general, me doy muy pocos días libres. De hace algunos años para acá no me puedo dar el lujo de tener muchos días libres, porque el tema de ponerse uno a punto como un jugador ya más maduro siempre es un poco más difícil.
“Usted tiene que estar muy atento a los entrenamientos, el trabajo diario; en mi caso creo que ha sido una bendición de Dios grandísima estar todos años manteniéndome activo, porque además siempre he estado con club, eso ha sido muy importante, va por la disciplina y el querer competir, eso te da una vida futbolística más larga”, comentó.
La receta de jugadores como Rafa o Barrantes muestra que en el fútbol no hay imposibles y que haciendo las cosas de determinada manera se ven resultados, por lo que siente que son buenos ejemplos a seguir.
“Sí claro, creo que lo somos, porque ya hemos visto que se puede, no solo Michael y Rafa, el tema reciente de Bolaños (se retiró en diciembre con 39), el de Álvaro Saborío, quien tomó la decisión de retirarse (jugó el torneo pasado con 41 años).
“Creo que ese es el camino, uno siempre busca orientar a los jóvenes, sobre qué es el trabajo diario, qué es realmente el profesionalismo, eso es lo que uno puede dejar a las nuevas generaciones. Ellos siempre se están fijando en los referentes de cada club, los de experiencia y eso es una labor muy bonita que tenemos que dar nosotros en ese rol, día con día”, añadió.
Cerca de las cuatro décadas, Núñez aún se ilusiona en madrugar todos los días para ir a entrenar, estar en los partidos, correr, barrerse, pelear por los balones divididos, por esas pequeñas cosas que solo los jugadores entienden.
Al finalizar el semestre, su contrato con los pamperos acabará, pero hoy no está pensando en el retiro o en qué pasará al finalizar el campeonato solo quiere disfrutar del fútbol y cuando llegue ese momento, es cuando verá que decisión toma, lo que le diga el corazón, como lo ha hecho siempre en su carrera.