Imagino que muchas veces se ha topado con un “Vendedor de humo”, de esos maes que llegan a su trabajo y le ofrecen una "crema de rosas” que cura todo, que le dan las soluciones para mejorar los departamentos y con buena hablada se quieren exhibir ante los demás como una persona que sabe de todo y hace de todo.
Son estudiados y graduados en cuanto curso se inventen por ahí, pero mejor no les haga mucho caso a esos personajes que aparecen en su vida laboral y mejor tome de ejemplo a esa persona que tiene la experiencia y las vivencias sobre la forma en la que se hacen las cosas.
Sea un buen observador y vea, por ejemplo, como el vendedor de copos decora su carrito para que llame más la atención; vea como el señor del supermercado del barrio hace promociones de mercadeo para tener contenta a su clientela y saca un parlante, pone globos, hace concursos para los chiquitos y regala tamales. Él, con cero presupuesto hace un fiestón.
Usted, con mucha creatividad y pensando un poquito puede ingeniar grandes ideas para su trabajo, algo que sus colegas le agradecerán. Podría crear campañas publicitarias, inventar guiones para sus videos en redes sociales. Todo en lo que su empresa pueda figurar es importante y no importa si es un taller mecánico, un lava carros o una sala de belleza, ya que cualquiera siempre puede manejar con seriedad su publicidad.
No haga mucho caso, a los títulos universitarios, porque esos los tiene cualquiera en este país, mejor haga caso a las personas con experiencia, a las que toman iniciativas en todo, aproveche la creatividad de un compañero del brete.