El cubano Marcel Hernández vino a ponerle azúuuucar, como diría la famosa finada Celia Cruz, al amargo momento que estaba pasando Cartaginés luego de la salida de Paulo Wanchope.
Hernández fue pieza clave para la goleada con la que los brumosos aplastaron a Pérez Zeledón este domingo en el Fello Meza.
Los sureños pagaron los platos rotos de la salida de Chope del club y aunque muchos aficionados estaban malos por la forman en la que el técnico los dejó plantados, todo da a parecer que, a partir de ahora, más bien están felices de que jaló porque por fin volvieron a ganar después de ocho partidos de no hacerlo.
El juego arrancó con un Cartaginés tratando de imponer condiciones y con Martín Arrióla como técnico y Danny Fonseca como asistente.
Pérez Zeledón al mejor estilo de José Giacone, primero aguantó a ver qué ofrecía el cuadro rival para empezar a mover a su equipo con su bujía, Álvaro Sánchez, respaldado por Rafael Rodríguez, tratando de abrirle los huecos necesarios a Josué Mitchell para que el delantero se convirtiera en el ladrón de balones en el gallinero blanquiazul para hacerle daño a su rival.
El regreso de Jossimar Pemberton a la formación cartaga generó una sociedad que en los primeros 20 minutos le dio esperanza a los azules de poder encaminar las ofensivas con claridad.
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Cabe destacar que durante las 10 mejengas que dirigió Chope con el Cartaginés, sus pupilos mostraron algunos chispazos de buen juego, sobre todo en aspectos de recuperación y en ofensiva.
Durante este domingo contra los Guerreros del sur se mantuvieron, pero con la gran diferencia que el equipo este domingo sí definió, o sea, como que el problema venía del banquillo.
En el caso de Pérez, ese equipo aguerrido y peleador en la primera parte apareció a cuenta gotas.
En el segundo tiempo la idea del Cartaginés se acrecentó y tuvo el premio justo.
En el minuto 55 una corrida por el centro de Luis Pérez, primero terminó con un servicio al costado derecho para Jossimar Pemberton, que de seguido asistió al cubano Marcel Hernández que no perdonó con un derechazo imparable para el portero Bryan Segura.
Llegaba el 1-0 más que justo para los anfitriones.
hasta ese momento los verdaderos guerreros en la cancha eran los de casa, en parte, gracias a que Luis Pérez se soltó a jugar en el segundo tiempo y así, precisamente, llegó el 2-0.
Se jugaban 62 minutos cuando Pérez recibió y se fue hacia el marco rival, siendo derribado por Edder Monguío con falta de penal, la cual ejecutó el especialista desde el manchón blanco, Jamesson Scott para celebrar el 2-0.
Por cierto, Scott remató soltando todo su coraje mostrándole a sus seguidores que se debe tener fe en el trabajo, pese a los malos resultados.
Sin duda que la perseverancia tiene premio, porque Cartaginés no se conformó con el 2-0.
Los brumosos dueños de la mejenga en todas las líneas, terminaron de hincar a sus rivales, con cambios ganadores, como el del panameño Nelson Barahona, que con pocos minutos pudo hacer valer su ingreso. En el minuto 73 ejecutó un servicio de esquina buscando al goleador Hernández, el cual apenas tocó la redonda que terminó estrellándose en la cabeza de Edder Monguío para el 3-0 final.
Aunque ya en la zona técnica no estaba un ícono como Paulo Wanchope, si estuvo todo un histórico como Danny Fonseca, que vivió el partido como los más de 600 en su carrera futbolística, gritándo, dando órdenes para que ese instinto asesino deportivo con el que llegó su Cartaginés al Fello Meza, no se acabara nunca.
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Inclusive, si a los brumosos les hubieran indicado que debían jugar el resto del torneo este mismo domingo, sin duda lo habrían hecho, sin pensar en el desgaste, sino con la idea de poder acabar con todos su males de un solo zopapo.