El acento colombiano, la disciplina y el rigor táctico podrían volver al banquillo de la selección de Costa Rica si el entrenador Luis Fernando Suárez es confirmado para el puesto que dejó Rónald González.
Según sabe La Teja, el oriundo de Medellín, de 61 años, es el favorito para asumir el cargo, sin embargo, para que sea una realidad el técnico primero que desvincularse del Atlético Bucaramanga, de la primera división colombiana, para poder hacerse cargo de la Tricolor.
El equipo que quiera llevarse a Suárez debe cancelarle al Bucaramanga casi ¢124 millones ($200 mil). Diversos periodistas y medios en Costa Rica y hasta en Colombia afirman que si bien eso complica la negociación, el cafetero sigue siendo el favorito para el puesto.
Este sábado el Comité Ejecutivo de la Fedefutbol se reunió y le dio chance a Suárez de desvincularse del club hasta este lunes. Si lo logra, es casi un hecho que será el próximo técnico de la Tricolor.
Luis Fernando sería el primer colombiano, después de Jorge Luis Pinto, en asumir la Sele, por lo que es inevitable no compararlos.
Al igual que Pinto, Suárez también dirigió a Honduras, selección a la que llevó al mundial de Brasil 2014 y a los Juegos Olímpicos de Río en el 2016.
Julio Cruz, comunicador hondureño, que conoce bien el trabajo de los dos técnicos, y explicó que Suárez es un técnico con personalidad y carácter, que se hace respetar ante los jugadores y no le tiembla el pulso dejar un referente afuera si es necesario.
“Con nosotros no hay quejas, cumplió los objetivos trazados de llevarnos al mundial y de una manera, digamos un poco holgada, en comparación a México que fue cuarto. Ganamos en el Azteca en esa eliminatoria. Creo que Costa Rica toma una buena decisión porque conoce bien el área.
“Acá tuvo el temple de no llamar a futbolistas como Jerry Bengtson, que era el goleador de la selección en la eliminatoria y se mantuvo en su idea a pesar de las críticas, cuando él considere que no se debe llamar a un peso pesado, lo hará, porque aquí lo hizo y podría pasar en Costa Rica”, ejemplificó Cruz.
Entre las diferencias que encuentra, Cruz considera que Suárez es mucho más conciliador y no tiene los problemas de camerino o de carácter que tenía Pinto, por los que se le paraban de uñas en ocasiones sus dirigidos. O sea, es más gente.
“El profesor Suárez no es tan militar ni aplica los métodos de Jorge Luis Pinto con sus seleccionados, tiene una buena relación con el futbolista, le gusta hablar con él, da un poco más de libertades, el futbolista se siente un poco más cómodo”, añadió.
Buen colmillo
Aunque Alexandre Guimaraes es otra de las opciones para el puesto, Suárez saca ventaja porque, al igual que Guima, también ha disputado dos mundiales mayores.
Además de llevar a la H a Brasil 2014, clasificó a la selección de Ecuador a Alemania 2006, adonde casualmente se topó a la Tricolor que dirigía Guima y le endosó un 3-0, triunfo que le valió para clasificar a los octavos de final de esa copa.
Además, en Colombia hizo campeón al Atlético Nacional en 1999 y 20 años después al Junior de Barranquilla, lo que lo vuelve un técnico muy apetecido y reconocido en su país y en diversas partes de América.
Luis Fernando Suárez está a una firma de la Sele, pero si no logra desvincularse y estampar la chayotera, Guima ya tiene los tacos listos y todo.