EscucharCon el pitazo final de Hugo Cruz el domingo anterior, la ilusión se volvió realidad para la familia De León Campos. El torneo dedicado a su recordado y querido papá quedó en manos del Team florense, equipo que tanto amó don Orlando De León en vida.
La lluvia fue lo de menos para doña Cecilia y Laura, viuda e hija del Ojo de Tigre, quienes fueron invitadas al partido por parte de la Unafut en representación del dedicado. La emoción era bien grande para que un poco de agua les echara a perder el momento.
Terminada la mejenga ninguna de las dos podía disimular la cara de felicidad y doña "Ceci" fue contundente, un torneo dedicado a don Orlando no podía ganarlo otro equipo más que el Team.
"Esa es la realidad, desde que le dedicaron este campeonato a Orlando nosotros teníamos en el pensamiento y todos nuestros deseos que esto lo tenía que ganar el Herediano. Vivimos el partido con mucha emoción, el equipo se manejó muy bien y dominó siempre, es un momento muy especial para la familia", comentó la viuda.
Para doña Ceci esta corona del Herediano vino a compensar un momento muy frustrante en la vida de su esposo, perder la final del Verano 2010 ante Alajuelense cuando estuvo a segundos de ganarla en el estadio Morera Soto.
"Ese campeonato del 2010 para él fue tan frustrante, que para mí este en el que fue dedicado es que como si Orlando también hubiera quedado campeón para reponer aquel que no pudo tener", agregó la señora.
Regreso triunfal
A su lado, Laurita, como le decía el tata, estaba demasiado orgullosa. Probablemente para pocos aficionados rojiamarillos el título significaba tanto en lo personal. Luego que su papá murió a la "Reina de la Plancha" le costó mucho volver al estadio. Lo logró hasta este enero.
"Es muy lindo volver al estadio de esta forma, con un campeonato para Heredia y sobre todo un título que se ganó tan fácil, hubo sufrimiento como en todos los partidos, pero fue una serie muy bien manejada, muy manejada", indicó De León, a quien se le entrecortó la voz un par de veces.
La artista llevó su fiel amuleto, la camiseta que usó el papá en la final del Verano 2010. Esta vez no pudo ponérsela como el miércoles pasado en la mejenga de ida porque debió ir con ropa formal, pero la tuvo bien agarrada todo el partido.
Laura quedó además con el orgullo que fue el viejo quien abrió el portillo para devolverle al Team la mentalidad campeona.
"Acá hay méritos de muchas personas, creo que lo que papi más ayudó fue a devolver esa ilusión a los heredianos en el camerino que sí se podía volver a creer. Hay que reconocer que (Hernán) Medford manejó muy bien esta serie, por todo el cuerpo técnico y jugadores. Tuvieron sangre y cabeza fría para liquidar en el momento justo", destacó.
El cielo también está de fiesta festejando por el nuevo campeón nacional.
