A Rónald González, técnico de la Sele, no le asusta que México y Estados Unidos tengan equipazos llenos de jugadores de gran rendimiento en las mejores ligas del mundo, pero la afición sí está con temor del papelón que se pueda hacer.
Costa Rica enfrentará este jueves a las 8 de la noche a México por la semifinal de la Liga de Naciones Concacaf y a Estados Unidos el miércoles 9 de junio en un amistoso.
Mientras que estas dos selecciones convocaron a jugadores que figuran en las mejores ligas del mundo, la Sele lleva a Celso Borges, quien con 33 años, juega en la segunda división B de España (tercera división), a un portero que recién acaba de descender a segunda división con Limón como Esteban Alvarado y a otro que, pese a tener una buena proyección, apenas hace sus primeras armas en el Celta de Vigo B, de la segunda división española, como Patrick Sequeira.
Si bien es cierto Sequeira ha estado en el banquillo del primer equipo, como por ejemplo en el Nou Camp contra Barcelona, no dejar de ser un chamaco en un puesto clave, como la portería.
Además, la mayoría de legionarios que lleva la Sele son de la fabulosa MLS, como Francisco Calvo, Rándall Leal, Luis Díaz y Josep Mora. Además, están Bryan Oviedo quien juega en el Copenhague de Dinamarca y Joel Campbell en el León de México.
De los ticos convocados el que está mejor posicionado es Óscar Duarte, quien juega en el Levante de España.
Los demás son jugadores del medio local.
“No me asusta que México o Estados Unidos tengan jugadores en cualquier lado. Nuestros jugadores han competido ante potencias mundiales en copas del mundo y hemos ganado, empatado y perdido. No me pongo a hacer valoraciones relacionadas con donde juega este o el otro, sino que tenemos a nuestros futbolistas y debemos sacarles el máximo provecho.
“En el 11 contra 11 veremos qué pasa, porque sigo confiando en que el jugador costarricense tiene esa capacidad para competir”, dijo el técnico antes de jalar para Estados Unidos..
Pero ojo, veamos lo que tiene México, el rival de este jueves en la semifinal.
Cuenta con tres jugadores en la primera división de España, Héctor Herrera (campeón con el Atlético de Madrid), Néstor Araujo (Celta de Vigo) y Andrés Guardado (Betis). Hirving Lozano juega en el Napoli de la Serie A de Italia y el habilidoso Jesús Corona en el Porto de Portugal.
Además, cuentan con dos pupilos en los equipos grandes de Holanda, Erick Gutiérrez en el PSV y Edson Alvarez en el Ajax, mientras que Gerardo Arteaga lo hace en el Genk de Bélgica.
El único que juega en una liga media rara es Héctor Moreno en el Al-Gharafa de Qatar. Hay dos en la MLS, Jonathan Dos Santos y Alan Pulido. Los demás juegan en la competitiva liga mexicana.
El contraste es evidente.
Los jugadores ticos dicen que el último juego que disputaron ambas selecciones, en marzo, en Austria, es un parámetro que indica que a los mexicanos les gusta jugar a ras de suelo. En esa ocasión, México ganó 1 a 0 con gol de Lozano en el minuto 89.
“Hace poco los enfrentamos y sabemos que es una selección que le gusta jugar de pie a pie, que es intensa y trata de recuperar tras la pérdida de balón, por lo que tenemos que trabajar eso. Intentar presionarlos cuando pierden la pelota, tener el control y ser agresivos”, señaló el defensor Francisco Calvo.
Bryan Oviedo dice que cuando Costa Rica quiera atacar, debe cuidar muy bien las espaldas, pues los aztecas parecen jugar con otro ritmo.
“Debemos cuidar la intensidad de ellos, los contraataques, las transiciones que las hacen muy rápido, por lo que tenemos que estar atentos, jugar nuestro partido y tener la pelota. Estar bien parados a la hora de atacar, ya que ellos van a tratar de sacar esa arma, que lo vimos ante Islandia (fogueo del sábado anterior que ganaron 2-1), recuperar la pelota en el medio campo y de ahí atacar a los defensas”, expresó Oviedo.
Más armados
Y si vamos a Estados Unidos, la situación es peor porque cuenta con un equipazo.
Tiene cuatro jugadores en la Premier League: Christian Pulisic (Chelsea, campeón Champions), Zack Steffen (portero suplente del City, campeón de la Premier), Tim Ream y Antonee Robinson (Fulham), y dos en clubes top de España, Sergiño Dest (Barcelona), Yunus Musah (Valencia).
En Alemania juegan cuatro, John Brooks (Wolfsburg), Tyler Adams (RB Leipzig), Gio Reyna (Borussia Dortmund) y Josh Sargent (Werder Bremen).
En Italia tiene a Weston McKennie de la poderosa Juventus y en Francia a Tim Weah (Lille, campeón). Es decir, son doce jugadores gringos en las cinco principales ligas del mundo.
Pero además, tienen tres en Bélgica, uno en Portugal, uno en Turquía, uno en Austria y otro en Suiza, solo tres juegan en la MLS. Y Rónald ante esto no se inmuta.