Los futbolistas pegaron el grito al cielo porque veían como alrededor del mundo se frenaba el fútbol y en Costa Rica hasta este martes por fin pararon el balón y se apuntaron a la lucha en contra del coronavirus.
La Teja conoció que desde el lunes en la noche los capitanes de algunos equipos ya andaban inquietos y poniéndose de acuerdo para intentar de su parte frenar el torneo.
En redes sociales empezaron a aparecer mensajes criticando a los presidentes de clubes, al Comité Director de la Unafut y a la Fedefútbol porque el lunes por la tarde decidieron seguir jugando a puerta cerrada.
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“Increíble! La dirigencia del fútbol de este país olvidó los valores básicos del ser tico: la solidaridad y el amor al prójimo. Nosotros los que corremos y sudamos para darle alegría a la afición es a quienes exponen. El torneo debió suspenderse, nosotros también tenemos en nuestras familias personas de alto riesgo. Si algo llega a pasar la Unafut y la Federación son responsables desde este momento”, posteó el sancarleño Marvin Obando.
“Buenas, gente, un abrazo, aunque en estos tiempos no se pueda. Quiero dar mi opinión muy personal y como capitán quiero decirles que no entiendo como acá en Costa Rica no tomamos medidas extremas. A nosotros los jugadores nos hacen jugar, o sea en serio”, escribió el capitán morado Christian Bolaños y etiquetó a Unafut y Fedefútbol.
Después de conocer la decisión Bola volvió a escribir: “Gracias por escucharnos @UnafutOficial @fedefutbolcrc se tomo la mejor decision, la más sensata, ahora juntos tenemos que ser responsables como seres humanos y salir adelante siguiendo las recomendaciones del ministerio de Salud. Nos vemos pronto”.
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El portero de San Carlos Patrick Pemberton también alzó la voz.
“Somos humanos antes que jugadores. Señores de la @UnafutOficial - @fedefutbolcrc seamos serios y no jueguen con la salud de nuestros seres queridos. Tengo familia con factor de riesgo, mi esposa es asmática, y con la decisión que tomaron me exponen a llevar el virus a casa”, escribió Patrick.
El delantero de Guadalupe Din John Arias comentó: “Que irrespetuosos y desconsiderados al no pensar en nosotros como personas y nuestras familias, están esperando que alguien del fútbol se contagie, ahí sí van a correr y suspender”.
En Cartaginés también brincaron y se hicieron sentir.
“A mí me preocupa mi salud y mi familia (mi bebé de dos meses), la población vulnerable que me rodea, queremos ver el fútbol de forma profesional, pero a veces no nos tratan como tal”.
Al final sí fueron escuchados y la Unafut y la Fedefútbol, en conjunto con el ministerio de Salud decidieron que no jugarán más hasta que se frene la pandemia.