Cartaginés sufre, pero por lo menos lo hace desde zona de clasificación.
Los brumosos recuperaron el cuarto puesto de la tabla tras vencer 2-1 a un Carmelita que jugó con 10 desde el minuto 8 gracias a una güilada del argentino Jonathan Camio, quien jaló expulsado por matón.
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Con obligación compartida por ganar, debido a que los tres puntos significaban vida para uno en la parte alta y para el otro en la parte baja, el juego arrancó movido en el Fello Meza.
Cartaginés con Marcel Hernández y Julio Cruz como puntas claves, intentaron meter en su parcela al cuadro de la barriada manuda, que por supuesto puso resistencia con un buen orden táctico con el que, hasta les alcanzaba para llegar a saludar al portero Daryll Parker de vez en cuando.
Pero a veces hay jugadores que aunque entrenan toda la semana, en el pitazo inicial se nublan y echan a perder el trabajo de sus compas. Hablamos del argentino Camio.
El muchacho se olvidó del balón, en dos oportunidades para chocar a dos brumosos, pero en el segundo de estos impactos sacó el codo y le pegó en el pecho y la barbilla a Kevin Vega con mala intención.
El central William Mattus hijo, que estaba cerquita, vio la violenta acción y no dudó en mandarlo a las regaderas tempranito.
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Sus compañeros no desmayaron ante el descuido del sudamericano y le pusieron el pecho a las balas con todo.
Eso generó que dos minutos después, Andrés Vargas tomara la pecosa en media cancha ajena y filtrara un bombón exquisito para Sergio Núñez, el cual ingresó por la derecha dejando botado a Kevin Vega para soltar un derechazo cruzado frente a Parker para el 0-1.
Los carmelos, con el marcador a su favor, se ordenaron mejor para intentar detener a los brumosos con un hombre menos.
Por otro lado, Martín Arriola no se aguantó mucho para mover sus peones y evitar así una posible cartagada más. Sacrificó a Kevin Vega en la lateral izquierda para meter a Paolo Jiménez en la ofensiva y empujar hacia atrás a la zaga carmela.
El esfuerzo de los visitantes empezó a pasar factura y ya en el minuto 25 el conjunto blanquiazul tomó el control del juego, monopolizando el uso de la redonda, pero sin ser efectivo en la red enemiga.
Hasta que el minuto 46 apareció el cubano de siempre, eso sí, gracias a un brillante Jiménez que sacó a dos rivales en la banda izquierda, metió un centro alto que martilló el potente delantero para el 1-1.
Y para no perder la costumbre con los árbitros, ese tanto de la igualada llegó cargado de polémica porque el balón salió antes de que Paolo lograra centrar, lo que desató la furia del técnico Palomeque y de sus dirigidos.
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Fuera de sí, los carmelos regresaron desorientados del camerino y en solo cinco minutos de la complementaria Cartaginés puso todo en orden en casa.
Primero Julio Cruz rescató una pelota y la sirvió por la izquierda a Jiménez, quien sacó el mismo libreto que uso en la jugada del primero gol para dibujar la del segundo.
Amagó, Sergio Núñez se comió el movimiento y vino el 7 con otro servicio al área enemiga para que Cruz apareciera tocando de cabeza para el 2-1, al minuto 50.
Por cierto, viendo el brete de de Paolo cabe preguntar, ¿qué hacía en la banca?
Después de ese gol el cierre del partido fue un concierto de llegadas del Cartaginés.
Pero así como llegó las botó, porque no fue capaz de aumentar las cifras pese a que se cansó de patear al marco defendido por Kevin Chamorro, quien ingresó de cambio por la lesión del titular Bryan Rodríguez.
Casi todas las ofensivas cartaginesas fueron comandadas por Jiménez, Marcel y Cruz, un trío que cuando llega conectado, pone en muchos aprietos al rival.
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De esta forma, aunque sufriendo al principio y desperdiciando al final, el cuadro blanquiazul regresó al cuarto lugar, al sumar 31 puntos, los mismos que el Team, ambos con siete goles positivos en su diferencia, pero los brumosos con 31 goles anotados contra 28 de los rojiamarillos.