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El Saprissa se salvó 105 veces en los últimos 17 años gracias a los goles en la Saprihora según un estudio del historiador Carlos Retana, un conteo en el que están muchos jugadores pero en el que no aparece el carmelo Carlos Montenegro, quien este domingo tuvo su propia versión de este fenómeno para robarle una victoria al Monstruo.
A los cinco minutos de reposición del segundo tiempo, el defensor pisó el área morada y de cabeza le salvó un punto a los verdolagas en la última jugada del partido, dándole una cucharada de su propia medicina a los morados.
“Dios me dio la bendición de hacer un gol al final, creo que es merecido, hicimos un buen segundo tiempo, el primero nos costó un poco, pero se consiguió sacar algo, por dicha quedé solo a la hora de llegar a cabecear y no lo dudé, uno no piensa con quién va, sino solo en anotar”, explicó el anotador.
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Este es el primer pepino del jugador en este torneo, luego que en el Clausura 2018 marcó tres golcitos.
Para que Montenegro aplicara su versión de la Saprihora era indispensable que primero llegara el gol del descuento, el cual cayó a los 82 minutos por parte de Jorge Gutiérrez, un pepino de tiro libre que se lo clavó al ángulo del arquero Kevin Briceño.
Con 24 años, el lateral izquierdo es de los que está ganando cada vez más protagonismo en el equipo de Mario Víquez desde el torneo anterior.
“El técnico me ha dicho que los practique, que nada más le de fuerte y me tenga confianza, el gol cayó en un minuto importante, el equipo estaba luchando, estábamos peleando a pesar que habíamos perdido varias opciones, nunca nos rendimos”, destacó el jugador carmelo, protagonista de la recuperación de los verdolagas.
