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En el 2013 apareció un chamaco en la delantera de Saprissa que llenó de ilusión a muchos morados, ya que pque el compa tenía pasta y pintaba muy bien, pero algunas malacrianzas e infantiladas lo frenaron en seco con la afición.
A punta de palo y curando chichotas por tantos golpes recibidos, Ramírez ve ahora las cosas con más serenidad, tras casi cinco años de su debut.
"Ya no juega tanto de vivo", dicen algunos aficionados quienes consideran que la madurez le está trayendo beneficios al delantero como el liderato de goleo del actual torneo de Clausura.
Con cinco pepinos en siete partidos, Ramírez la pulsea fuerte en el Monstruo y pretende ganarse el campo como titular, a pesar de que la competencia no será jugando.
El atacante reconoce que ha cambiado mucho de mentalidad y que ahora se concentra más en sus obligaciones. A sus 24 años tiene otra visión de las cosas
"Antes andaba pensando en otras cosas, no me presionaba tanto y cometí errores propios de la inmadurez, de los años, pero poco a poco una va aprendiendo porque pasé por cosas que me ayudaron a madurar", explicó Ramírez.
El ímpetu y las ganas le jugaron malas pasadas al delantero hace un tiempo (25 de agosto del 2013), como en una ocasión en el estadio Juan Gobán, cuando después de anotar enjachó a la afición que le pasaba reclamando por su rendimiento y los insultó.
Unas horas después de haber terminando el partido, Ramírez tuvo que disculparse mediante un video que difundió el equipo.
"Ahora disfruto lo que hago, Dios me dio un talento y no tengo que presionarme solo debo aprovechar eso y tener más tranquilidad. La gente ve cuando uno se esfuerza y ahora salgo a la cancha a pasarla bien", destacó.
David destacó que analizó mucho todo lo que hizo en el pasado y que se esfuerza por no repetir esos errores, los cuales provocaron que se hablara más de temas extrafutbolísticos que de su desempeño en la cancha.
"Conforme van pasando los años me voy dando cuenta que las cosas pueden mejorar, que uno puede cambiar. He cometido errores y soy el primero en reconocerlo, pero con eso no es suficiente porque debo trabajar para no volver a cometerlos", dijo.
Un punto importante para ese cambio de casete fue su paso por Europa, donde tuvo cierta regularidad con el Moreirense de Portugal donde disputó 21 partidos, pero solo clavó dos goles.
"Ese paso por Europa me ayudó bastante y me dio una nueva perspectiva, por eso ahora lo que intento es disfrutar y seguir mejorando como persona y profesional", agregó.
Las críticas más bien fortalecieron al delantero y las tomó para bien. Ahora a punta de goles volvió a ganarse los aplausos y el cariño de los morados, quienes también lo ven disputando el Mundial de Rusia.
